'MasterChef’ se ha convertido ya en uno de los concursos más longevos de la televisión. Este próximo año cumplirá una década en antena de forma ininterrumpida con tres ediciones anuales. Entre los anónimos, los famosos, los abuelos o los niños, y algún que otro especial, el talent show acumula más de 20 ediciones. A tan solo dos semanas de descubrir quién ganará la nueva temporada Celebrity, Shine Iberia ya está inmersa en el casting de ‘MasterChef 11’ que vivirá un importante cambio. En esta ocasión, se contará con 32 concursantes, y se vivirá una expulsión en cada día de emisión.

El concurso de cocina más duro del mundo se ve envuelto en una nueva polémica por las últimas declaraciones de uno de los concursantes anónimos. Se trata de Alberto Gras, uno de los concursantes más atractivos de su edición y que se posicionaba como ganador, sin embargo cayó en el programa nueve. Enamorado de Luna, otra de las concursantes, aunque ahora ya han tomado caminos separados, y su corazón lo ocupa otra persona. En el terreno profesional Alberto está de moda, y es que a pesar de no ganar, ha seguido los pasos de un ganador en todos los aspectos, Aleix Puig. Como el de Manresa, Alberto ha abierto su primera hamburguesería en Barcelona.

Alberto Gras
Alberto Gras

Alberto Gras abre 'Deleito' en Barcelona y compite con Aleix Puig

Se trata de ‘el Deleito’, una hamburguesería situada muy cerca de la Plaça Francesc Macià. “Trabajo 14 horas al día”, reconoce. Alberto también ha tenido tiempo para hablar de ‘MasterChef’ y ha desvelado algunos de los secretos que esconde. El programa de TVE no permite que los concursantes hablen en lenguas cooficiales del Estado. El chef reveló que la productora les prohibe hablar en catalán con sus familias. “Mientras estás en el concurso permaneces encerrado en una casa y solo puedes hacer una llamada de tres minutos una vez a la semana con una persona al lado que controla lo que dices”, detalla.

“No me dejaban hablar en catalán porque debían pensar que explicabas cosas que no podías. Hablaba en castellano con gente que de normal habló en catalán, era rarísimo. A la mínima que decías algo en catalán ya te llamaban la atención”, continúa.

Alberto Gras participó en la octava edición del concurso, la que se vio afectada por la pandemia. Los últimos cinco concursantes tuvieron que pasar más tiempo encerrados en aquella casa sin sus familias. El programa no les permitió volver. Grabaron con todas las medidas de seguridad cuando se levantó el estado de alarma. Así que pasó 42 días extras viviendo con unos auténticos desconocidos. “Si llegan a poner cámaras en aquella casa, lo petan en cualquier televisión. Habían muchas discusiones”.

El joven también ha revelado que a día de hoy no mantiene ningún contacto con la mayoría de sus compañeros, pero mucho menos con los miembros del jurado. Y es que Alberto Gras no ha vuelto a ser invitado al programa.