Recientemente, la actriz y cantante Jennifer López protagonizó una gran polémica al confesar en su nuevo documental llamado ‘Halftime’, que haber compartido escenario con Shakira en el ‘Super Bowl’ 2020 “fue un error”, pese a que ha sido una de las presentaciones del medio tiempo del ‘Super Bowl’ más exitosa y aclamada de los últimos años.

Sin embargo, la artista no solo ha hablado de su experiencia como artista; también ha abordado temas muy personales que eran desconocidos para la mayoría de sus fans. Desde sus inicios en el barrio del Bronx en Nueva York, la artista reveló cómo fue crecer en una familia repleta de mujeres y con una madre con un carácter difícil, que llegó a propinarle varias palizas durante su infancia y juventud por su personalidad rebelde y sus sueños de triunfar en Hollywood. A través de este nuevo documental de Netflix, Guadalupe Rodríguez, madre de JLo, también da sus declaraciones sobre la infancia de sus tres hijas y la complicada relación que tenía especialmente con Jennifer.

La puertorriqueña, madre de Leslie, Jennifer y Lynda López, relató cómo fue su difícil mudanza a Nueva York desde la isla de Puerto Rico: “David y yo nos mudamos al Bronx. Era un cuarto piso sin ascensor y solo tenía un dormitorio. Tuve a mis tres hijas en ese departamento”. Debido a las dificultades económicas, Guadalupe fue endureciendo su carácter para forzar a sus hijas a que se labren su propio camino. En el documental, JLo confesó lo siguiente: “Mi madre hizo lo que tenía que hacer para sobrevivir y eso la hizo fuerte, pero también la hizo dura. Nos daba tremendas palizas”, desvelando la dura infancia que vivió gracias al carácter de su madre. Además, también añadió: “Mi mamá es una persona súper complicada y tiene mucho bagaje emocional. Su generación pensaba: 'Un hombre se casará contigo, te cuidará por el resto de tu vida y te mantendrá'. Y ella soñaba con cosas mucho más grandes. Soñaba con ser actriz".

Lamentablemente, Guadalupe nunca pudo cumplir su propio sueño de ser actriz. Sin embargo, se enfocó en la educación y la formación de sus hijas para que pudieran salir adelantes. Tanto Leslie como Lynda resultaron ser jóvenes muy obedientes y con buen desempeño académico, pero Jennifer se mostraba un poco más rebelde y con inclinaciones artísticas muy marcadas. “Fue la que más me hizo sufrir”, confesó la madre de JLo, a lo que la cantante respondió: “Me enamoré de la danza y me distraía completamente de la escuela y mi mamá me decía: 'Si quieres vivir en esta casa, tienes que estudiar'. Una noche tuvimos una gran pelea y simplemente me fui. Tenía 18 años".

Después de muchos años, madre e hija han podido recuperar su relación y actualmente son inseparables. "No fui la madre perfecta ni mucho menos, pero lo único que puedo decir es que todo lo que hice lo hice para su bien. Me alegra que sea fuerte, debes serlo para sobrevivir en esta industria", indicó Guadalupe mientras mira a su hija, quien se muestra visiblemente emocionada con estas palabras.