Mercedes Milá acabó harta de ‘Gran Hermano’, pero no del programa en sí, que aún le guarda un gran cariño, sino por ciertos problemas personales a los que tenía que hacer frente. La catalana afrontaba una depresión. El estrés del trabajo pudo con ella. "He tenido varias depresiones. La primera fue por un desamor muy doloroso, las demás yo creo que sí que han sido por exceso de trabajo y estrés. No podía más... Era capaz de estar llorando toda la semana hasta el jueves, levantarme ese día, hacer el programa bien y que nadie se diera cuenta de nada. Estaba encantada, feliz de la vida. Fue de mis momentos más felices haciendo televisión, y un gran acierto hacerlo".
La primera edición de ‘Gran Hermano’ fue sin duda la más recordada por todos los españoles. Uno de los programas más vistos de la historia de la televisión, anotando datos similares a los de un Barça-Madrid. Millones de personas permanecían todas las semanas sentados en el sofá pendientes del televisor para ver un novedoso reality donde 16 personas convivían encerradas en una misma casa durante tres meses.
Íñigo sufrió un infarto la semana pasada y tuvo que ser operado de urgencia
Precisamente, los seguidores del formato están pendientes de uno de los concursantes de esta edición. Íñigo, conocido como ‘el del polo verde’, ha sufrido un percance de salud esta última semana por el que ha tenido que ser operado de urgencia. Ha sido el ceutí el encargado de explicarlo en sus redes sociales. "Esta madrugada a las seis de la mañana he tenido un infarto. Los médicos del Hospital Virgen Macarena se han portado de escándalo me han operado de urgencia y me han puesto un estén en la arteria descendente”.

"Tenía obstruida esa arteria y eso ha provocado el infarto de esta mañana. Ahora me duele un poco el pecho, pero me encuentro mejor. Estoy en la UCI de este maravilloso hospital. Estoy cómodo y muy bien tratado", añadió.
"Las enfermeras me preguntan por cómo fue la experiencia en Gran Hermano y dicen que tengo mucho sentido del humor. Creo que he vuelto a nacer. Millones de gracias a todos los que estáis pendientes", relata Iñigo.
Además, comparte una reflexión: "Sé que parece muy típico, pero por favor: vivid la vida a tope, haced cosas que os hagan sentiros felices y no preocuparse por nada. Se me saltaron un poco las lágrimas porque amo mucho mi vida y no quería dejaros tan pronto".