David Bisbal es uno de los rostros más populares de OT. Él sí es sinónimo de éxito. Tras salir de la academia más famosa de la televisión ha conseguido labrarse un futuro en el mundo de la música, pero no solo a nivel nacional, también internacional. Pocos pueden decir lo mismo. De las actuales generaciones tendríamos el mismo ejemplo en Aitana. Pero por OT han desfilado más de 100 cantantes. La mayoría de ellos juguetes rotos y grandes olvidados, como Mai Meneses, o más conocida como Nena Daconte.
Su grupo de música, formado junto a Kim Fanlo, fue todo un éxito a principios de los años 2000. Algunas de sus canciones como ‘En qué estrella estará’ o ‘Tenía tanto que darte’ han marcado un antes y un después, y todavía se recuerda su letra. Sin embargo, esa época estuvo marcada por las inseguridades y las adicciones. Como le ha sucedido a muchos artistas, la fama repentina pudo con ella.
Aunque ya no tiene un gran éxito, Mai Meneses continúa involucrada en el mundo de la música. De hecho, el pasado fin de semana cantó en las fiestas de Esplugues de Llobregat, en Barcelona. Este mes de septiembre ha lanzado un libro autobiográfico titulado 'Tenía tanto que darte: amor, música, ansiedad, sueños y locura’. Entre sus páginas desvela los secretos ocultos de la fama.
Por supuesto, no falta un capítulo dedicado a OT, donde se convirtió en la primera expulsada. "Haber salido la primera me dejó un poco de trauma. En las firmas de discos mi cola siempre estaba vacía. Una parte de mí estaba dolida", ha asegurado en Socialité.
Mai Meneses empezó una relación con Kim Fanlo, con quien formó el dúo Nena Daconte. Se separaron en 2010 y allí empezó una batalla legal por el nombre del grupo. Finalmente, se le reconoció la autoría a ella. Aquellos momentos gloriosos fueron los mejores y peores de su vida al mismo tiempo.
Mai Meneses coqueteó con el alcohol y las drogas
Además, asegura que los músicos de la banda intentaron boicotearla. "En aquella época era superinsegura y tenía montones de miedos. Si yo no hubiera sido tan insegura, ciertos comentarios o actitudes no me habrían sentado mal", revela ahora la artista, de 44 años.
La cantante se refugió en el alcohol y las drogas. "El alcohol me ayudaba a evadirme. Era una forma de ser feliz momentáneamente", confesó en una entrevista a la revista Semana. En ‘Socialité’ ha hablado del consumo de la marihuana. "Los mejores años de mi vida a nivel profesional los desperdicié porque no me di cuenta. Hay millones de cosas que no recuerdo. En mi caso me pasé un poco y me pasaba el día fumando porros. Terminó siendo una pesadilla. No paré los tres últimos años que yo estaba mal y seguía consumiendo. Fue un poco cuando toqué fondo y fui a Madrid a rescatarme a mí misma", explica.
Acudió a varios psiquiatras y le diagnosticaron bipolaridad y depresión psicótica. "Creo que es difícil que los psiquiatras acierten (...). Yo me tomo mi pastillita por las noches y ya está", explica.