César Millán será siempre conocido como ‘el encantador de perros’. Hace una década que National Geography decidió cancelar las grabaciones de su programa de máxima audiencia. El entrenador canino conseguía rehabilitar a la mayoría de perros agresivos para convertirlos en mascotas ideales y adorables. El programa se emitió en todos los países, por este motivo el mexicano alcanzó una gran fama a nivel mundial. Llegó a escribir siete libros e impulso el primer centro psicológico canino.
Un rancho de 18 hectáreas, en California, en el que tiene un gimnasio para perros, un albergue, una granja y una terraza para los humanos que quieran visitarlo. "Creé este lugar para que las personas puedan ingresar a un hogar seguro, en paz y amor, donde todos los animales y especies viven juntos en armonía”, contó en YouTube.
Desde pequeño sintió una gran pasión por los animales. Fue en su adolescencia cuando decidió ayudarles. "Un día, iba a un campeonato de judo y, en el camino, me paré en el malecón de Mazatlán y le dije a mi mamá '¿crees que puedo ser el mejor entrenador de perros del mundo?' y ella ni sabía que era eso, pero me dijo '¡tú puedes ser lo te de la gana!'", comentó Millán, a CNN.
Lassie y Las aventuras de Rin Tin Tin fueron las dos series que le hicieron interesarse por los animales. Le hicieron pensar que su futuro estaba en Norteamérica. Por este motivo, con tan solo 100 dólares en el bolsillo, viajó a la frontera. "En cuanto llegas al cruce, lo primero que ves es gente queriendo aprovecharse de ti. Pueden venderte, pueden matarte por órganos. Morir es más probable que conseguir saltar", relató. A veces se dejaba atrapar por la policía para comer gratis y no gastarse dinero.
César Millán vivió una profunda depresión
Encontró trabajo como peluquero canino y poco después entró en una residencia canina. En 2002 abrió su propio centro para trabajar con perros agresivos. A raíz de ahí nació la idea del programa. Sin embargo, mientras tenía un gran éxito televisivo, su familia se rompió a trozos. En el año 2010, César Millán tuvo que despedirse de su fiel compañero, Daddy. Además, su esposa le pidió el divorcio, lo que le provocó una profunda depresión. "Tuve pensamientos suicidas a causa de un sentimiento de fracaso. Ese sentimiento de fallar y no ser lo suficientemente bueno. Hablas contigo mismo, piensas que nadie te quiere, que tu clan no te quiere. Y mi clan familiar simplemente se fue... Es como si tu casa estuviera ardiendo y no pudieras hacer nada", dijo en 2018, cuando ya llevaba dos años comprometido con la que hoy sigue siendo su enamorada, la estilista Jahira Dar