Por lo general, se suele pensar que los artistas y celebridades no conocen nada más que lujos y confort. Sin embargo, muchas de las celebridades que en la actualidad presumen de su éxito y de su fortuna, han vivido una infancia difícil, con carencias económicas y con muy pocos recursos, pero gracias a su esfuerzo, dedicación y talento han logrado convertir su pequeño piso de la infancia en una verdadera mansión millonaria.
Esta es la historia de Shakira, quien vivió toda su infancia en un barrio muy pobre de la ciudad de Barranquilla, Colombia, junto a su familia de ascendencia libanesa por parte de padre, y española por parte de su madre. En la actualidad, Shakira es una de las artistas femeninas más influyentes del planeta, y una de las más ricas, dado que ha acumulado una fortuna de más de 300 millones de dólares, derivada de las ventas de sus álbumes y de sus millonarios contratos publicitarios que ha firmado a lo largo de su carrera artística.
Casa antigua de Shakira
Durante los primeros años de vida de la cantante, vivió junto a su familia en un pequeño piso situado en el barrio “El limoncito”, ubicado en la calle sagitario 86-135 en la ciudad de Barranquilla, un lugar que recuerda con mucho cariño, ya que nunca ha negado sus orígenes humildes. Aunque este pequeño lugar no corresponde a la cuarta parte de alguna de sus mansiones, donde vive con su pareja, el futbolista Gerard Piqué, y sus dos hijos, Milan y Sasha, la cantante suele pasear por las calles de su antiguo barrio cada vez que va de visita a su país natal, Colombia.
A pesar de todas las carencias económicas que vivió Shakira durante su infancia, sus padres siempre la alentaron para que siguiera sus sueños, y dentro de esas cuatro paredes, en un piso diminuto y sin ningún tipo de tecnología disponible, la artista grabó su primer disco llamado “Magia”, cuando tan solo tenía 14 años, una proeza que solo se consigue con esfuerzo y mucha dedicación.
Debido a que su estancia en ese departamento marcó un momento muy especial en la vida de la cantante, cientos de fans se han acercado a las afueras del conjunto de apartamentos para conocer un poco más de su ídolo, buscando algún remanente de su pasado que los acerque a los inicios de la vida de Shakira. Sin embargo, los visitantes deben conformarse con admirar la fachada de la casa, ya que los actuales dueños no permiten que los fans entren al lugar.
Además de revelar con orgullo sus orígenes humildes, la cantante ha querido ayudar a los niños sin recursos de varias ciudades de Latinoamérica para retribuir de alguna manera su éxito. “A lo largo de mi vida he visto como la educación hace milagros, he visto vidas e incluso comunidades enteras transformarse; y créanme, ver que un niño que no tenía posibilidades de triunfar logra salir adelante y obtener igualdad de oportunidades en su adultez, es una sensación tan satisfactoria que incluso supera la de ganarme un Grammy”, escribió Shakira en la página web su fundación “Pies Descalzos”, creada en 1997.