En la ficción, Carrie Bradshaw se moría por llevar unos Manolo Blahnik en sus pies. El icónico personaje de Sexo en Nueva York interpretado por Sarah Jessica Parker a finales de los 90 tenía una gran pasión, aparte de sus amigas, de sus parejas y de Manhattan: tener un armario gigante lleno de zapatos exclusivos.
'Sex and the City'
la pasión traspasó la pantalla y el año 2014 la actriz fundó su propia marca de zapatos, con tiendas por los Estados Unidos, Canadá o Dubái, tal como recuerdan en La otra crónica. La marca SJP contempla modelos que van desde los 150 hasta los 350 euros. "Sé que los precios causan controversia. Me encantaría hacer zapatos por un precio mucho más bajo, pero no puedes llevar zapatos hechos a mano en Italia por menos. No puedo pedirle a un cliente que gaste el dinero que tanto le costó ganar en alguna cosa que se rompa a las dos semanas".
Sarah Jessica Parker (@sarahjessicaparker)
Sarah Jessica Parker (@sarahjessicaparker)
Parker lleva un tiempo demostrando que se está dejando la piel en su nuevo negocio y no ha dudado en ponerse a hacer ella misma de dependienta en alguna de sus tiendas. "No creo que nadie se pueda permitir el lujo de ser vago hoy, porque los clientes están informados. Cómo más tiempo pase en el suelo, sobre mis manos y rodillas, literalmente poniendo zapatos, más sabré y será mejor para los negocios. Iré a trabajar al suelo unas ocho o diez veces el año, porque hoy tienes que estar en contacto con el cliente", ha sido su declaración de intenciones, ante la sorpresa de algunos clientes al ser atendidos por la icónica Carrie de una de las series más recordadas de hace 20 años.
Sarah Jessica Parker (GTRES)
Sarah Jessica Parker (GTRES)
Son imágenes de hace pocos días, cuando los paparazzis vieron a Parker probando zapatos a sus clientes en su boutique de Nueva York, entre la quinta y la sexta avenida, en el corazón de Manhattan, dónde si no.