Una de las grandes damas de la aristocracia, Pitita Ridruejo, ha muerto a los 88 años en Madrid. Casada con el diplomático Mike Stilianopoulos, tuvo una vida donde se relacionó a menudo con la reina de Inglaterra, que la invitó a Windsor, y otros miembros de la jet set de todo el mundo. "Era íntima de las Kennedy, en especial de Pat. Ella y yo estuvimos en la boda de su hija en los Hamptons y coincidimos con toda la familia. También era muy amiga de la princesa Margarita de Inglaterra, que estuvo en su casa de Marbella un mes entero hace muchos años", ha dicho una de sus íntimas una vez se ha sabido la noticia.
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Nacida Esperanza Ridruejo, también fue amiga de la reina Sofía, y todavía más de la princesa Irene, la condesa de Romanones o la duquesa de Alba. Musa del escritor Paco Umbral, estuvo también a punto de serlo de Dalí, pero ella declinó que la pintara porque se iba de viaje de bodas a las Filipinas.
Muy religiosa, escribió un libro donde hablaba de sus experiencias con apariciones marianas, aunque cuando el mismo Umbral le preguntó "¿Por qué no te metiste monja?", ella le respondió: "Por la maternidad, yo necesitaba la maternidad, lo sentía en los niños de Soria, en los niños de los pobres, en todos los niños que me rodeaban, era más fuerte lo de la maternidad".
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Pero su ferviente fe la llevó a ver a la Virgen de vez en cuando. La primera vez, en 1985 en una finca de El Escorial. La combinación de religiosidad y ser un icono de la noche madrileña de los años 80-90 hicieron de ella un personaje peculiar e icónico.