Jedet se acerca al final de su proceso de transición. La actriz transgénero nacida en Girona hace 28 años, y criada entre l'Escala y Granada, se sometió a finales de julio a un par más de operaciones estéticas, que tenían que ayudarla a sentirse a gusto con su cuerpo y su identidad. Una cirugía de feminización facial y un aumento de pecho, tras los cuales ha necesitado un mes de recuperación y cuyo resultado ya está dispuesta a mostrar públicamente. Pero su felicidad no es compartida por un reducto de tránsfobos que se han dedicado a burlarse e insultarla, antes de que ella misma decidiera responder para que la dejen en paz.

"Hola, por fin soy Jedet. Encantada de conoceros". Así es como la protagonista de la webserie Veneno se ha presentado en sociedad por segunda vez, como el ave fénix que renace de sus cenizas. Esta vez, con la imagen que siempre había deseado tener. "Es un alivio mirarme al espejo y sentirme feliz", explica. La artista hace unos dos años que empezó a recibir tratamiento hormonal y decidió que quería algunas cirugías plásticas: una rinoplastia, un aumento de labios y una liposucción en el cuello para dar a su rostro una sensación de mayor feminidad. También se ha hecho sesiones de láser en la cara para hacer desaparecer la poca barba que todavía le pudiera quedar. Finalmente, esta es su nueva imagen:

Pocas horas más tarde de mostrarse tal y como es ahora, la actriz se ha visto obligada pronunciarse de nuevo. El motivo, los ataques contra ella después de las cirugías. En las redes sociales, Jedet brama que la dejen tranquila: "Exponerme a las críticas después de 12 horas de quirófano y un mes de recuperación no ha sido fácil (...) Bastante duro es pasar por una transición como la luego tener que leer comentarios crueles. Ojalá supieran qué se siente al pasar por un proceso como este, no tendrían narices para escribir una burla o un insulto".

"Debe ser muy duro estar tan podrido por dentro", espeta. Bienvenida Jedet, con más fuerza que nunca.