Hace unas semanas se estrenó un nuevo programa radiofónico, El matí de Ràdio 4, conducido por Xavi Freixes. Uno de sus colaboradores, Rocco Steinhouser, llegaba al estudio esta semana acompañado de un tercer invitado, el showman y actor Joan Estrada. Figura esencial de la Barcelona de la década de los años 80, del Paralelo, pieza clave en la difusión de los filmes de Ventura Pons, creador de la 'Cúpula Venus' y director artístico de los espacios teatrales 'Barcelona de Noche', el Teatre Arnau, 'El Molino' y la 'Sala Muntaner', Estrada ha regalado sus recuerdos a los oyentes y una de las cosas que ha recordado ha alborotado a presentador y oyentes.

Estrada conoció a famosos y celebrities de todo tipo, "uno que me hizo mucha ilusión, en el Paralelo, donde nunca se hacía fiesta, era Michele Piccoli...". Le cortan y le preguntan por "la época Bárbara Rey". Y él: "¿Es que vosotros queréis lío, eh?". Y lío es lo que ha comentado de lo que pasó una noche en un camerino. "Yo la conocí, supongo que tenía 'rey', pero no lo sabíamos. Yo era muy amigo de Jordi Vila", un Vila que se hizo famoso en los espectáculos de revista del Paralelo barcelonés durante la Transición, haciendo de pareja, de partenaire de actrices como Sara Montiel o la mencionada Bárbara Rey. Hicieron, por ejemplo, el espectáculo 'Barcelona es Bárbara' en el Teatro Victoria. Y Estrada ha empezado entonces a explicar qué pasó en un camerino con "Bárbara Rey, José Manuel Parada, Chelo García Cortés y Jordi Vila, que en paz descanse".


El invitado incide en las dos funciones que se hacían del espectáculo, tarde y noche. Y entremedio, tiempo para ir a cenar fuera, allí al lado... o allí mismo. "La madre le hacía una fiambrera y ella se quedaba a cenar en el camerino y Jordi se quedaba allí para que no estuviera sola. Un día vinieron de Galicia Chelo y Parada, que entonces eran matrimonio. Eran pareja, pero ya vivían cada uno su vida". ¿Qué pasó, con "el regidor llamando a la puerta y diciendo '15 minutos'"? Que dentro se oían frases que generan estupor, juzguen ustedes mismos, como la que le dijo "Vila a Parada" y que tiene que ver con hábitos alimenticios y con "ternascos" y que ha hecho que Freixes suelte un sincero y explícito: "Me he quedado sin palabras". Escuchen y juzguen ustedes mismos:
"Es una frase que me hizo mucha gracia", añade Estrada. "Vila era muy catalán. Fue un encuentro, pero con el reloj que se acababa el tiempo. Me lo explicó Jordi Vila". "¿Esta señora era una fiera, eh, Rocco?", remata Freixes.