Telma Ortiz era conocedora de todo el entramado de Jaime del Burgo y Letizia, ella fue una de las colaboradoras necesarias en su relación. La hermana de la reina mantuvo una relación sentimental con el abogado, se casaron en 2016 y se divorciaron tan solo dos años después, cuando Jaime desapareció completamente de la vida pública. Hace algo más de un año regresó con fuerza para hacer daño a Casa Real. Jaime del Burgo destapó que la madre de Leonor y Sofía fue infiel a Felipe VI con él, este es el verdadero motivo de la crisis entre ellos en el año 2012 y no precisamente la situación de la corona. Estuvieron viéndose en secreto varios años, incluso después de descubrirse la relación.

Letizia y Jaime del Burgo / TV3
Letizia y Jaime del Burgo / TV3

Según Jaime Peñafiel, Letizia utilizó a Telma Ortiz para verse en secreto con Jaime del Burgo. La reina viajaba en muchas ocasiones a Barcelona con la intención de reencontrarse con ella, pero realmente era para verse con el abogado, reservaban una habitación en el hotel Ars de la capital catalana. Telma les encubría, como también hizo en su momento Paloma Rocasolano, ella les dejaba la buhardilla de 37 metros cuadrados en Madrid.

Jaime y Letizia pretendían formar una familia en Nueva York mediante la gestación subrogada 

Jaime del Burgo y Telma Ortiz tuvieron una buena relación, por ello, cuando salió todo el escándalo, la hermana de la reina se puso en contacto de nuevo con el abogado para frenarle los pies  y para dejarle claro que su hermana estaba sufriendo con esta situación, no quería que bajo ningún concepto destapase lo que ocurrió en Nueva York con Letizia.

El abogado ya destapó que ambos se veían en Nueva York. De hecho vivían allí y Letizia solo veía a España para atender sus compromisos institucionales. Querían formar una familia. Ya habían mantenido conversaciones con una mujer para tener un bebé mediante la gestación subrogada, que en Miami es legal. Sería raro ver a la monarca de nuevo embarazada, un escándalo. Además, Felipe VI tendría que reconocer ese hijo como propio. Tanto Jaime Peñafiel como Maica Vasco corroboran que los papeles para este proceso ya estaban firmados. Le hubiese gustado tener un niño, ya que ya tuvo las niñas. Eran felices, pero todo se truncó y dejaron de verse. Leonor y Sofía ya habían nacido cuando sucedió esta historia de amor extramatrimonial y la monarca no estaba dispuesta a perder a sus dos hijas que nunca podrían irse con ella en caso de divorcio, siempre se quedarían en Zarzuela con Felipe VI. Además, tampoco estaba dispuesta a renunciar a la corona.

Jaime del  Burgo Letizia Ortiz Roma GTRES
Jaime del Burgo y Letizia Ortiz en Roma / GTRES