Desde su entrada a la familia real británica, Meghan Markle ha estado envuelta en polémicas y señalamientos que han puesto en jaque a la monarquía. Ahora, con el inminente divorcio entre la duquesa de Sussex y el príncipe Harry, las tensiones entre los hermanos reales parecen haber alcanzado su punto más álgido. Guillermo, quien está destinado a convertirse en el futuro rey de Inglaterra, ha dejado en claro que no quiere tener ningún tipo de vínculo con Meghan Markle. Según informantes reales, el príncipe heredero al trono considera que la exactriz de 'Suits' ha traído demasiados problemas y polémicas a la familia desde que se unió a ella, así que exige su exilio para poder retomar su relación con Harry.

Un aviso ignorado: los rumores de interés y ambiciones de Meghan Markle

Se dice que el príncipe de Gales fue uno de los primeros en advertir a su hermano sobre las verdaderas intenciones de Meghan Markle antes de su boda, en 2018. Se rumorea que la duquesa tenía fama de buscar hombres por interés, buscando obtener dinero y poder. Sin embargo, Harry pareció ignorar las advertencias de su hermano mayor y se embarcó en un matrimonio que ha resultado ser todo menos un cuento de hadas. Ahora, con los problemas matrimoniales de Harry saliendo a la luz, el príncipe parece haberse dado cuenta de la verdadera cara de su esposa. Según fuentes cercanas a la familia real, Harry ha tomado la decisión de divorciarse de la duquesa de Sussex en un intento desesperado de recuperar el apoyo y el amor de su familia, especialmente el de su hermano Guillermo. Sin embargo, el príncipe de Gales no está dispuesto a ceder fácilmente. 

El deseo de reconciliación: sin Meghan en el horizonte

Recordemos que las declaraciones explosivas de Harry en su libro de memorias revelaron una relación tensa entre los hermanos. Harry describió su vida como una sombra en comparación con su hermano y cuestionó su papel como príncipe de repuesto. Estas revelaciones han dejado a Guillermo profundamente herido y resentido. A pesar de su dolor, Guillermo estaría dispuesto a dejar atrás el pasado y reconstruir la relación con su hermano. Pero hay una condición: Meghan Markle debe desaparecer por completo de sus vidas. Guillermo desea que sus sobrinos, Archie y Lilibet Diana, crezcan en el Palacio bajo la tutela de la Familia Real, lejos de la influencia de Meghan y de los escándalos que ha traído consigo.

La incertidumbre sobre el futuro de la relación entre los príncipes Harry y Guillermo se cierne sobre la realeza británica. Con la sombra del divorcio acechando, la lucha por desterrar a Meghan Markle se intensifica, añadiendo una capa adicional de complejidad a la situación. La pregunta que todos se hacen es si Guillermo será capaz de perdonar a su hermano por las ofensas pasadas, y si podrán reconstruir el lazo fraternal que alguna vez compartieron, o si esta batalla familiar se prolongará indefinidamente, dejando heridas emocionales irreparables en la vida de los hijos de Carlos III y Lady Di.