La Corona española tiene un problema con sus dos únicas sucesoras directas en el trono: Leonor y Sofía. La princesa sufre una crisis de imagen a causa de la irresponsable decisión de hacerla pasar sus primeros tres años de adulta no en la Universidad, como cualquier futuro mandatario europeo, sino a los tres ejércitos. Ahora toca el Ejército del Aire mientras su hermana, dos años más pequeña, ya está en la Universidad haciendo Ciencias Políticas. La imagen es como si Leonor hubiera repetido tres años Bachillerato y no pudiera entrar en ninguna universidad. El mes que viene hará 20 años, edad en la cual muchos universitarios acaban los estudios. Felipe VI todavía tiene que convencer los ciudadanos que es más importante que el jefe del Estado aprenda a pilotar helicópteros que a moderar los partidos políticos. El desastre de imagen es total.
El problema añadido es que su sucesora, la infanta Sofía, parece más preparada que Leonor. Con 18 años ha mostrado más personalidad negándose a poner un pie al Ejército e imponiendo su criterio de estudiar fuera de España, un privilegio que no han tenido ni Felipe, ni Elena, ni Cristina conscientes del escándalo que supondría para la Universidad española este menosprecio. Nadie se explica cómo la hija pequeña de 18 años ha ganado este pulso a la Corona y es Pilar Eyre la que revela qué se esconde tras estos 5 años durante los cuales no veremos Sofía en España: los dos en Gales haciendo Bachillerato y ahora tres más en Lisboa, París y Berlín sucesivamente estudiando Políticas. Sofía tiene un problema que lo obliga a marcharse del país: una fobia.
Escribe Eyre en Lecturas: "A Sofía le horroriza tener a la prensa pegada a sus talones todo el día y Letizia sabe que la actuación de los paparazis sería incontrolable. Felipe se resistía a que Sofía, que es la niña de sus ojos, se volviera a alejar del hogar familiar, tan vacío y triste ahora, pero al final accedió a regañadientes y, una vez puestos los tres de acuerdo, tocaba elegir centro en el extranjero. Pero ¿dónde? Letizia, que aborrece todo lo que huele a pijo o elitista, rechazó propuestas como Princeton, Eton o la Sorbona". Ha acabado en un centro sin ningún prestigio internacional, de reciente creación, hace 4 años que se constituyó, el Forward College. Allí Letizia quiere imponer un imposible, que nadie haga fotos a su hija porque les tiene fobia. Eso fue fácil de cumplir en Gales donde todos los estudiantes eran menores. Ahora es otro absurdo de Letizia. Incluso la revista Hola ha publicado fotos robadas de Sofía en la capital de Portugal.
Eyre revela la ira de Letizia al comprobar cómo ya incluso la monárquica revista Hola publica fotos robadas de Sofía sin ni siquiera informar la Corona: : "Las fotos “robadas” que aparecieron la semana pasada en el campus del Forward College, fotos que disgustaron profundamente a Letizia. No por lo que salía en sí, una chica con tejanos y sudadera algo despistada en medio de decenas de jóvenes desconocidos, sino porque temió que el resto de la prensa pensara que había trato de favor hacia una revista. Esas imágenes se tomaron sin que ni siquiera la infanta se diera cuenta y fue una sorpresa para el equipo real. Se desmiente la leyenda de que el material que hay sobre Letizia o sus hijas debe ser visionado en la Casa y que la reina debe dar el visto bueno.Las desfavorecidas fotos de Letizia en la misma revista yendo a un restaurante colombiano también le molestaron, no porque saliera escuálida y algo desaliñada, sino porque no tuvieron el detalle, no ya de pedirle permiso, sino de comunicárselo". Sofía tiene pánico que la retraten como a su hermana mayor, en bikini, y la solución es la más absurda y drástica: en lugar de ayudar a Sofía, enviarla al quinto pino. La misma estrategia que con el rey emérito, en lugar de afrontar los problemas, enviarlos lejos de una patada. Los exilios no pueden esconder la evidencia: Juan Carlos es un rey corrupto y Sofía ni quiere ni puede ser reina.
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