La relación adúltera de Letizia poniendo los cuernos a Felipe confesada por el amante de la reina, Jaime del Burgo está comportando muchos daños colaterales: Peñafiel despedido, Del Burgo silenciado y Letizia hundida. Pero hay un efecto que es la madre de todas las bombas en Zarzuela: el divorcio de Letizia y Felipe. Una consecuencia lógica de un desamor, una infidelidad y una ofensa pública. Todo dependerá de si lo decide uno de los dos cónyuges, Letizia o Felipe. Si uno de los dos lo quiere, el divorcio se hará efectivo. Zarzuela solo impone una condición, que el matrimonio aguante hasta una fecha: 29 de abril de 2025. Es el día que la segunda hija, la infanta Sofía, será mayor de edad. Así van las cosas en Casa Real, la infanta Cristina no firmó el divorcio hasta que la hija pequeña Irene cumplió los 18 años. La razón es legal: como cualquier matrimonio en España que se divorcia con hijos menores de edad, hace falta que un juez ratifique el convenio de divorcio para saber cómo y quién ejercerá la custodia. El escándalo de un divorcio de los reyes tendría un añadido legal: ponerse de acuerdo en cuál de los dos, el padre o la madre, Felipe o Letizia, se quedan la custodia de Sofía y que un juez lo ratifique. Sofía es la clave.
A Letizia le quedan como mínimo un año y 3 meses de seguir casada con Felipe. Ella no le tiene miedo a disolver su matrimonio, ya está acostumbrada: será su segundo divorcio. EN Blau ha consultado los papeles secretos de su primer divorcio, el que firmó el año 2002 con su primer marido Alonso Guerrero, su profesor de literatura en el Instituto. Letizia fue precoz en todo: se enamoró de un adulto diez años más mayor siendo Letizia menor, tuvieron una relación sentimental, se casaron y se divorciaron. Pero lo que no se ha explicado es quien pidió el divorcio y por qué. El año 2002 una juez de Arganda del Rey, Madrid, dictaba sentencia acordando el divorcio de Letizia Ortiz y Alonso Guerrero. Los papeles de aquel divorcio siempre se ha dicho que los custodia el CNI. Pero quien los mostró en público fue David Rocasolano, primo de Letizia, amigo íntimo del matrimonio y consejero jurídico de la princesa. Esta es la sentencia de divorcio de Letizia, que sorprende para dos cuestiones poco explicadas: quién pidió el divorcio y por qué causa:
El divorcio se produjo de común acuerdo pero quien pidió el divorcio, quien presentó la demanda de divorcio, fue él, Alonso Guerrero. Eso abre las especulaciones que fue Alonso Guerrero quien acabó desencantado con el matrimonio y da munición a los enemigos de Letizia que alegan que Jaime del Burgo no fue la primera infidelidad de la reina en sus dos matrimonios. El divorcio de Letizia es previo a la reforma Zapatero, que dictaminó el divorcio libre. Antes de Zapatero, si un matrimonio quería divorciarse no podía hacerlo libremente, tenía que alegar una causa de entre un listado de causas legales tipificadas, como por ejemplo el alcoholismo, la toxicomanía, los maltratos... o el adulterio. ¿Qué causa alegó Alonso Guerrero para pedir el divorcio de común acuerdo con Letizia Ortiz? Que el matrimonio hacía más de un año que vivían separados. Se separaron por desavenencias y un año después como no se reconciliaron pudieron pedir divorciarse.
Alonso Guerrero nunca ha hablado de por qué se separó de la actual reina, si fue adulterio, cansancio o desamor. Pero los papeles de divorcio son públicos. Letizia puede estar tranquila, su divorcio con Felipe no será público. Por ley todo lo que tiene que ver con el estado civil de los Borbones va a un Registro Civil Especial propio de Casa Real. Como los Capítulos matrimoniales donde Letizia firmó renunciar a la custodia de sus hijas, o como la pensión de divorcio que está pagando Cristina a Iñaki Urdangarin. Todo eso es secreto por ley. El segundo divorcio de Letizia no será tan fácil ni público como el primero. Apunten la fecha: 29 de abril de 2025.