David Rocasolano fue el primero en romper su silencio y aprovechar la situación de su prima. Poco después de la boda de Letizia con Felipe VI, publicó una biografía no autorizada de la entonces princesa de Asturias. Este hecho causó el primer disgusto a los reyes de ese momento, Juan Carlos y Sofía. El rey emérito había anticipado problemas con la familia de su nuera, y no se equivocaba. Letizia confrontó a David y a su familia para que este acto no quedara sin consecuencias. Aunque Rocasolano lanzó su libro, perdió el apoyo de todos, incluida la reina. La madre de Leonor y Sofía tomó medidas para vengarse, movilizando a la Hacienda Pública para que lo persiguieran.
En las páginas del libro, Rocasolano revelaba numerosos episodios oscuros sobre la reina. Según él, la familia de Letizia no tenía ni un euro y vivía en condiciones muy humildes. No podían permitirse un brasero para los fríos inviernos asturianos, y se abrigaban con muchas mantas y calcetines gruesos. Las acelgas eran su alimento principal, y David recordaba visitar a sus primas, quienes tenían los labios morados del frío. Jesús Ortiz, el padre de Letizia, pretendía ser importante, pero realmente no aportaba mucho dinero a la casa y no era un periodista exitoso.

David Rocasolano describía en su libro que cuando él visitaba a Letizia y sus primas, ellas lo recibían con los labios morados, envueltas en sábanas y pijamas dobles, usando calcetines porque no podían permitirse encender un brasero ni tenían suficiente para comer. Llamaba a esa casa "la casa de las acelgas" porque desayunaban, comían y cenaban acelgas, lo que explicaba su delgadez. En el pueblo ya se les conocía como "los acelgas".
Letizia ayuda a toda su familia
Telma Ortiz, la hermana de Letizia, prefería quedarse en casa de amigas para comer bien y no pasar frío, evitando dormir en su propia casa durante los fines de semana. Es sorprendente cómo ha cambiado su vida, ya que Telma ha aprovechado su relación con Letizia para conseguir trabajo. Desde entonces, se ha sentido superior a los demás, a pesar de trabajar en una ONG.
Y no es la única de la familia, Paloma Rocasolano, muy orgullosa por los méritos de su hija, también se ha aprovechado de la ocasión. Ella y Telma frecuentan los restaurantes de moda de la capital y las tiendas de ropa, joyas y cosmética más prestigiosas. Siempre dice “soy la madre de la reina” y quiere que todos se pongan a sus pies.
Letizia se encarga de financiar todos los gastos de su familia y hacer todo lo posible para que a ninguno les falte de nada. Carla Vigo vivía en un piso tutelado de 1.080 euros al mes, que pagó según ella con la revista exclusiva que concedió a Lecturas. Pero también se la pudo ver comprándose un bolso de la prestigiosa firma Hermes, modelo Birkin, desde 30.000 euros el más económico. Y se la ha podido ver en una inmobiliaria de lujo. “Está claro que Letizia ayuda a toda la familia”, dice Maica Vasco.
