Este martes 6 de mayo ha sido un día duro en palacio, concretamente, en el Principado de Mónaco. El príncipe Alberto ahora acaba de saber de una noticia que lo ha dejado devastado. El Principado está de luto después de saberse de una muerte que como dicen en la revista Lecturas, "le ha sumido en una profunda tristeza". ¿De quién? De un íntimo amigo del soberano, el doctor Michel-Yves Mourou, a los 81 años, una pérdida que ha generado una enorme conmoción en Mónaco.
Se trata de un eminente radiólogo y ex jefe del departamento de Radiología del Hospital Princesa Grace hasta que se jubiló en el año 2009. Debido a su currículum, fue nombrado en el consejo de la corona en el 2003, pasando a ser su presidente justamente el año 2009, cargo que ostentó hasta nueve después, en el 2018, cuando Alberto lo nombró consejero privado suyo. Por lo tanto, era una persona muy ligada al día a día tanto del príncipe como de su familia más próxima. En cuanto se ha sabido de esta pérdida, desde el Principado no han tardado en emitir un sentido comunicado en nombre del príncipe Alberto: "Es con profunda tristeza que S.A.S. el Príncipe Alberto II ha recibido la noticia de la muerte del Doctor Michel-Yves MOUROU. Rendir homenaje a la memoria de un hombre dedicado al Principado, que se distinguió por la constancia y la calidad de su compromiso al servicio de sus conciudadanos".
"Durante 15 años para la Corona aportó sus competencias, su discernimiento y su fidelidad a las instituciones monegascas. Fue un hombre que dejó huella en los trabajos parlamentarios y en el desarrollo legislativo del Principado". El príncipe Alberto, especialmente compungido y tocado, ha querido expresar en primera persona cómo siempre le dio muestras "de un profundo sentido de la ética y del deber. En este momento de duelo, el príncipe Alberto II expresa a su familia, a sus familiares y a todos los que lo conocieron y apreciaron, sus más sinceros pésames y la expresión de su sentida compasión".
El difunto, más allá de con el príncipe Alberto, también tuvo un especial vínculo con las hermanas del príncipe, las princesas Carolina y Estefania, así como con sus respectivos hijos: "Hoy, todos ellos lloran la pérdida de un hombre que fue capaz de guardar sus mayores secretos hasta su muerte". De hecho, Mourou escribió incluso un libro el año 2010 sobre las princesas, una novela en la cual hablaba de ellas y del resto de mujeres ilustres de la realeza monegasca, como la princesa Grace, que en la portada aparece con un espectacular vestido rojo, joyas y el pelo recogido en una trenza: ""Damas de hierro o mártires, amantes apasionadas o madres solícitas, estas mujeres han contribuido, durante más de siete siglos, a la influencia del Principado y de la dinastía Grimaldi junto a sus Príncipes. Desde Santa Devota hasta las princesas actuales, Carolina y Estefanía, hijas de la legendaria princesa Grace, es una galería de retratos cautivadores y entrañables que desfilan, con sencillez y autenticidad por estas páginas". Un libro que ahora se ha convertido en objeto de coleccionista.
Descanse en paz.