Letizia siempre ha tenido mala relación con los Borbón porque nunca la han querido. Siempre la han hecho el vacío por el simple hecho de ser una plebeya. Se ha sentido menospreciada y por ello soñaba con el día en el que podría vengarse de todos ellos. La reina consiguió apartarles de la corona con el caso Nóos y las polémicas de Juan Carlos, pero no han sido los únicos que le han dado quebraderos de cabeza, su familia tampoco ha estado exenta de polémicas, especialmente Carla Vigo.

Carla Vigo podría ser el Froilán de los Borbón pero en los Ortiz Rocasolano, aunque ella tiene una excusa. La joven se quedó muy pequeña sin madre. Erika Ortiz, hermana de la reina, se quitó la vida tras una fuerte depresión que padecía. Han pasado casi dos décadas desde aquel fatídico episodio que salpicó la vida de toda la familia.
Desde entonces Carla Vigo ha sufrido varios problemas que ella misma ha comunicado en sus redes sociales con sus seguidores. Padece un trastorno de alimentación por el que ha acudido a especialistas en salud mental y ha desaparecido en largos periodos de tiempos.
Amistades de Carla Vigo aseguran que ha empeorado desde que cambió de compañías. Empezó una relación con un chico de Barcelona y ahí tuvieron sus quebraderos de cabeza. A día de hoy ha vuelto a su piso tutelado donde pagaría 1.500 euros al mes. Algo que sorprende porque la joven no trabaja, solo cobra 400 euros de pensión de orfandad que le retirarán este mismo año al cumplir los 25 años. Sería Letizia quien le ayudaría con estos pagos sin que saliese a la luz, la monarca le prometió a la hermana que cuidaría de ella.
Letizia no quiere que sus hijas tengan relación con Carla Vigo
Según su antigua amiga Christina Rapado, Carla Vigo tenía grandes oportunidades laborales que ella misma ha rechazado. “Carla es una chica maravillosa, pero está rodeada de personas que no le hacen bien. Intenté ayudarla, pero me vi obligada a distanciarme”, señaló Rapado.
Según Pilar Yuste, que coincidió con ella en un evento, la joven exhibió un comportamiento preocupante: se bebió diez cervezas en minutos, fue al baño repetidas veces y no podía mantenerse en pie. Más tarde, durante una cena, hizo comentarios inapropiados, preguntando si el restaurante tenía "sustancias ilegales de postre”. La joven no parece dispuesta a escuchar consejos de nadie.
La familia está muy preocupada por la conducta de Carla Vigo y sus peligrosas amistades.
