Como la película ‘Tú a Boston y yo a California’, así ha sido la vida de la reina Sofía y Letizia. No les ha quedado más remedio que avenirse por el bien de la corona y la estabilidad del reinado de Felipe VI, a quien ninguna de las dos le harían daño por diferentes intereses. Entre ellas siempre ha existido una importante rivalidad, es el momento en que se empezó a tambalear su relación. Los Borbón nunca recibieron a la asturiana con los brazos abiertos por el simple hecho de ser una plebeya, presentadora de informativos y divorciada. Para la emérita era un escándalo, especialmente que ya se hubiese casado con otro y se hubiese divorciado, es una persona muy religiosa, y por contra la madre de Leonor y Sofía es agnóstica confesa.

Son muy diferentes pero tienen un mismo propósito. Las dos han sido reinas de España, y es cierto que la reina Sofía siempre ha recibido grandes apoyos por parte de los ciudadanos. A día de hoy es una monarca muy querida, esto ha hecho mucha sombra a Letizia en los primeros años y por ello ha rivalizado con ella. Ha intentado ganarse su sitio y quitarse esa sombra tan pesada. Ahora mismo la mujer de Felipe VI es una de las reinas mejor valoradas a nivel internacional y especialmente la más aplaudida en cuanto a estilismo y protocolo. No tiene rival en otras monarquías.
Letizia no se compadece de la reina Sofía en su peor momento
Letizia ha conseguido con sus artimañas que la reina Sofía sea olvidada. Debido a su avanzada edad prácticamente ya no tiene compromisos institucionales. Felipe VI ha querido retirarla de la vida pública, pero a día de hoy, debido a su estado anímico, no es la mejor decisión.
Según Pilar Eyre, anímicamente la reina Sofía está muy mal, lo está pasando realmente mal desde que falleció su hermano Constantino y a su hermana Irene se le detectó Alzheimer. Se ha quedado sola y la familia totalmente separada. Se encierra en su habitación, a oscuras, no quiere salir ni recibir visitas, apenas come ni duerme. La preocupación es máxima. De hecho, Felipe VI voló a Madrid para verla tras una caída. A la monarca poco le importó, ella continúa unos días más de vacaciones como si no pasase absolutamente nada.
Letizia da la espalda a la reina Sofía y actúa con una actitud que enfada a muchos españoles. Es un feo gesto a la exmonarca en uno de sus peores momentos.
