La vida sexual de Juan Carlos es un asunto público: porque ya se ha publicado y porque a menudo se ha pagado con dinero público. Su amante Corinna vivía en el complejo residencial oficial de la Zarzuela. Los viajes del jefe del Estado por el mundo acompañado de mujeres que no eran la suya han sido pagados con el erario público y ahora por fin se ha destapado la razón de este furor sexual. Ha sido la cronista real Pilar Eyre quien en una entrevista al digital El Español es preguntada sin ambages: ¿Cómo hace el amor Juan Carlos? y ella tiene la respuesta.
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Eyre tiene información de primera mano. Cuando presentó su libro Carme la rebelde en Sevilla se le acercó un pariente del rey emérito y le dijo "Yo tengo este problema sexual, el mismo que Alfonso XIII y que Juan Carlos. Me he operado en una Clínica de Marbella, y Juan Carlos tiene el mismo". El último libro de Eyre habla de la amante de Alfons XIII Carmen Ruiz Moragas y el trabajo de investigación de la periodista catalana la hace concluir que el abuelo del rey Juan Carlos sufría priapismo. La entrevistadora lo ignora y le pregunta a Eyre "Qué problema sexual tiene Juan Carlos: ¿impotencia sexual"? y Eyre no se moja "Ponlo como quieras... no me quiero meter en un lío ni meterte en un lío en ti tampoco". Es una patología que consiste en sufrir erecciones anormales y dolorosas del pene, sin ningún deseo sexual.
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El priapismo es una enfermedad que ha provocado mucha literatura. La magnitud de la tragedia es la novela de Quim Monzó en que el protagonista la sufre. El cachondeo popular diría que Juan Carlos va siempre empalmado y por eso no tiene bastante con la reina Sofía, pero su problema médico requiere tratamiento. Eyre ya explicó que Alfonso XIII la sufría y ahora revela que un pariente del rey también la sufre y le explicó que el mismo rey Juan Carlos la sufre. Eyre dice que Juan Carlos ha practicado más sexo con más personas diferentes que Julio Iglesias:" Lo cuentan algunos amigos del rey, que él sólo tenía que señalar con el dedo a las mujeres que quería. De todo tipo: de la aristocracia, empresarias, mujeres jóvenes, mayores… el problema era elegir, porque, como decían ellos, se le ofrecían todas”.
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Juan Carlos no sufre ninfomanía sino un problema físico que le provocaba una concentración de sangre (azul) en la entrepierna. Ahora ya tiene 80 años y hace tiempo que no se le conocen aventuras extramatrimoniales. Parece que ha solucionado su problema médico y ha cedido la Corona y el cetro a Felipe. Le ha traspasado también un puñado de genes. La pregunta que queda por resolver es, como el priapismo es genético... ¿lo sufre Felipe VI?