Elena se distingue como la más representativa entre los miembros de la familia Borbón. Su admiración y respeto por Juan Carlos I la han llevado a confrontaciones con Felipe VI en más de una ocasión. Se siente profundamente agobiada por las constantes humillaciones que sus padres enfrentan. Elena también cuestiona la decisión del emérito de vivir a miles de kilómetros de distancia de su familia, dada su avanzada edad. Por ende, ha ofrecido alojarlo en su recién reformada residencia. La hermana del actual monarca acompaña a su padre en todas sus excursiones, ya sea en las regatas de Sanxenxo en julio o en las del Reino Unido en septiembre.
Desde que estallaron las controversias en torno a Juan Carlos, Felipe VI se ha desvinculado de su padre, renunciando incluso a cualquier futura herencia. Es probable que Leonor siga el mismo camino al alcanzar la mayoría de edad. Por tanto, la vasta fortuna del emérito recaerá en sus dos hijas, Elena y Cristina, así como en seis de sus ocho nietos, incluyendo a Victoria Federica y Froilán.
Aunque Juan Carlos anhela regresar a España, esto es poco probable debido al impacto negativo que tendría en su herencia. Los beneficios fiscales de los Emiratos Árabes son favorables para fortunas como la suya, que asciende a un total de 2.000 millones de euros. Por tanto, el esposo de Sofía pasará menos de 183 días al año en el país para evitar problemas con la Hacienda Pública. Aunque recientemente ha sido visto más frecuentemente en España o Europa, reside en Ginebra desde hace unos meses, cerca de la infanta Cristina, donde su dinero está también protegido y los traslados a España son más fáciles dada su edad.
Consciente de su edad avanzada y de su salud debilitada, el exmonarca busca resolver sus asuntos financieros para no dejar ningún problema a sus hijas. Su legado se limitará a su fortuna monetaria, por lo que ha comenzado a vender algunas de sus propiedades en Cataluña y Galicia.
Froilán sería el heredero de Juan Carlos para que su madre no declare en España
La infanta Cristina, al tener su residencia fiscal en Suiza, parece ser la destinataria más sencilla de esta herencia, mientras que Elena, con residencia fiscal en España, enfrentaría mayores complicaciones y posibles pérdidas al tener que pasar el dinero por Hacienda. No obstante, dado que Froilán reside y trabaja en los Emiratos Árabes, podría ser él quien reciba el dinero, con su madre actuando como administradora exclusiva de dicha cantidad. Sería el testaferro.
Según fuentes cercanas a la Familia Real, todas estas transacciones se realizarán fuera del alcance de la Hacienda Pública española, gestionadas desde Suiza y el Reino Unido, donde se encuentran las cuentas de Juan Carlos y los bancos que las manejan. Se estima que posee una fortuna oculta en paraísos fiscales de 2.000 millones de euros.
