Si a la infanta Elena y a la infanta Cristina les llegan a decir hace apenas unos años que en pleno 2024 tendrían vetada la entrada al palacio de Marivent, en Palma de Mallorca, seguramente la semanas del rey Felipe se hubiesen echado a reír, y a carcajadas.
Y es que no es que sea precisamente ningún secreto que la situación actual de las hermanas del rey respecto a su rol en la familia real española ha cambiado drásticamente desde hace ya unos años, sobre todo desde que el rey Felipe se hizo cargo del trono. Al margen de las polémicas familiares y de todo lo sucedido con su padre en los últimos años, la casa real tomó la decisión de cerrar filas en torno a Felipe, Letizia y sus hijas, por lo que las infantas y sus hijos quedaron en segundo plano.
Por otro lado, cabe destacar que la relación de la Reina Letizia con sus cuñadas siempre ha sido más que negativa, de ahí que ahora que ella está al mando de muchas cosas, tienen vetada la entrada al palacio de Marivent mientras ella esté de vacaciones en Mallorca, unas vacaciones que son cada año más cortas teniendo en cuenta lo poco que le gusta pasar tiempo con la familia de su marido.
Las hijas de Juan Carlos I irán a visitar al emérito
No es casualidad entonces que, ahora que saben que durante estos días no pueden disfrutar de la compañía de su madre en el palacio de Marivent, un palacio en el que disfrutaron durante muchos años de algunos de los mejores veranos de sus vidas, han decidido seguir la tradición de los últimos tiempos y marcharse lejos de Mallorca, en concreto a las Seychelles.

Es ahí donde Juan Carlos I, que evidentemente tampoco puede poner un pie en Marivent, pasa unos días de vacaciones desde hace algunos años, por lo que Elena y Cristina, acompañadas de sus hijos siempre y cuando sus agendas se lo permitan, deciden pasar unos días con su padre.
Es de sobras conocido que a todos ellos les encantaría no tener que reencontrarse precisamente en las Seychelles sino hacerlo en el Palacio de Marivent de Mallorca, pero los tiempos para la familia real española han cambiado de forma notable, y ahora, un terreno en el que siempre se habían sentido muy cómodos es un terreno muy pantanoso.