Después de especulaciones sobre las finanzas y cómo quedaría la situación de las infantas, ahora se sabe que la infanta Elena se prepara para recibir una herencia que ha capturado la atención de muchos. Se trata de una mansión situada en Abu Dabi, valorada en más de 11 millones de euros, que actualmente está a nombre de la fundación creada por Juan Carlos I. Esta propiedad, con lujos inimaginables y reservada únicamente a personalidades de gran poder, será destinada a ella y a su hermana, la infanta Cristina.

La mansión en cuestión forma parte de los activos que Juan Carlos I dejó en manos de su fundación, una entidad que ha estado en el centro de atención en los últimos tiempos, debido a las investigaciones y movimientos financieros relacionados con la familia real. La transferencia de esta increíble mansión a la infanta Elena y Cristina representa un paso importante en la gestión de estos bienes. 

Juan Carlos y la infanta Elena
Juan Carlos y la infanta Elena

La residencia en Abu Dabi no solo destaca por su valor económico y por su simbolismo. La propiedad, ubicada en una de las zonas más exclusivas de la capital de los Emiratos Árabes Unidos, simboliza la conexión del emérito con el mundo árabe y su presencia en regiones de gran influencia política. La infanta, conocida por su cercanía y compromiso con diversas causas sociales, y su hermana Cristina, también han sido figuras públicas que han mantenido un perfil discreto en los últimos tiempos. Sin embargo, los movimientos de Juan Carlos I continúan atrayendo la atención. 

La estrategia de Juan Carlos I para no dejar desamparadas a las infantas Elena y Cristina

Según informan los diarios, el rey emérito estableció una fundación en el extranjero que posee activos valorados en millones de euros, entre los cuales se encuentran propiedades de gran valor y otros bienes de interés. La intención del que fuera monarca parece ser que estas propiedades y fondos sean destinados a sus hijas, en reconocimiento a su papel en la familia y su apoyo a lo largo de los años. Considerando, a su vez, que ya no reciben asignación económica por parte de la monarquía. 

Juan Carlos I
Juan Carlos I

De acuerdo con El Confidencial, el rey exiliado pretende “rescatar los activos que todavía controla fuera de España y, posteriormente, transmitírselos a las infantas”. Aunque el patrimonio sigue siendo desconocido, The New York Times estima que podría rondar los mil millones de euros. Una suma a la que Felipe VI renunció, puesto que proviene de transacciones y negociaciones que se cree que son opacas. 

Juan Carlos I continúa enfrentando las acusaciones de su historia reciente en España, con preguntas que buscan aclarar su legado financiero y personal. La presencia de estas propiedades fuera del país, como la mansión en Abu Dabi de 11 millones de euros, refleja la complejidad de la situación y la importancia de la gestión patrimonial en el contexto de la realeza y las finanzas internacionales. En definitiva, la herencia de esta lujosa mansión a las infantas Elena y Cristina será muy comentada en el momento en que salgan a la luz los detalles del testamento.