Si bien es cierto que en los últimos años han sido muchas las polémicas que han rodeado la familia real española, también lo es que si hay una figura dentro de la institución que ha optado por mantenerse siempre al margen e intentar dar el mínimo número de problemas posibles esa figura no ha sido otra que la infanta Elena.
Por mucho que, como bien han explicado muchos de los expertos en la casa real española, la hermana del rey Felipe se haya mostrado en muchas ocasiones a nivel interno muy contraria a algunas de las últimas decisiones que se han tomado, sobre todo en todas las decisiones relacionadas con su padre, Juan Carlos I, siempre se ha mostrado muy discreta consciente de que su papel ahora no es otro que el de mantenerse en un segundo plano.
La pasión por el baile de la infanta Elena
Los que mejor conocen a la hermana del rey saben muy bien que, si bien es cierto que se ha criado en un entorno siempre lleno de lujos, ha sido siempre una mujer que se ha caracterizado por ser sencilla y, sobre todo, que no necesita mucho para disfrutar de la vida y para pasárselo bien.
Es más, parece ser que uno de sus grandes aficiones es el baile, y que disfruta de salir con sus amigos a disfrutar de esta pasión que, eso sí, de vez en cuando y sobre todo si algún día se ha tomado alguna que otra copa demás, provoca que sus escoltas tengan que ir con mucho cuidado intentando evitar que se tomen algunas imágenes que puedan dejar en mal lugar tanto la infanta como evidentemente de la institución.
En este sentido, si bien es cierto que la relación entre Felipe y la infanta Elena no es la mejor desde hace ya muchos años, sobre todo desde que desde la institución se tomó la decisión de que Juan Carlos I tenía que abdicar, sabe muy bien el rey que su hermana no va a ser precisamente motivo de problemas, aunque suela optar por dar rienda suelta a su amor por el baile y a que pase unos buenos ratos en compañía de sus amigos.
Eso sí, lo que sí que sabe también muy bien Felipe es que, por mucho que su hermana sea muy discreta en este sentido, sus hijos Froilán y Victoria Federica no han seguido sus pasos en este sentido.