Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina se verán las caras por última vez el próximo mes de julio. Ambos, por fin, serán totalmente libres. El exduque de Palma rehizo su vida el año pasado con Ainhoa Armentia, sin comunicarle a la madre de sus hijos su decisión de terminar con la relación. Descubrió la relación de su todavía marido a través de la prensa, como el resto de mortales. El padre de Juan, Miguel, Pablo e Irene iba de la mano de una mujer con melena rubia dando un paseo por la playa de Biarritz.
Aunque ha traicionado a la infanta Cristina y ha sido él quien ha decidido terminar con la relación, Iñaki Urdangarin no se irá con los brazos vacíos. El divorcio le beneficiará gratamente, y es que a la hija de Juan Carlos no le queda más remedio si quiere comprar su silencio. Ha formado parte de la familia real durante las últimas dos décadas y ha sido la persona que ha pagado todos los trapos sucios de los reyes. Él fue el único inculpado de la familia por el caso Nóos, aunque tanto Juan Carlos como Felipe, y hasta Cristina, eran absolutamente conocedores de todo el entramado.
Según el periodista Juan Luis Galiacho, Iñaki Urdangarin recibirá una pensión de 25.000 euros mensuales, aunque ya se habla de unos 10.000 euros, una indemnización de dos millones de euros y varias propiedades en la costa francesa, como Bidart. También se cumplirán sus deseos de mantenerle el escolta y se le pagarán todos los viajes que estén relacionados con sus hijos. No contento con ello, el exduque pediría alguna propiedad más. Además, quiere que se limpie su imagen y se le encuentre un trabajo a su medida, y eso que con lo que recibiría no tendría que preocuparse de trabajar nunca más.
Infanta Cristina aleja a Iñaki Urdangarin de Barcelona
Es muy común ver a la infanta Cristina cerca de sus hijos. Cada vez son más habituales sus visitas a Barcelona para ver jugar a su hijo Pablo a balonmano. Quien desaparece de la escena es Iñaki Urdangarin, y es que parece que a la hermana de Felipe no le gustaría coincidir con él. No quiere hacerle daño porque sabe que perdería mucho más, pero tampoco quiere verle la cara si puede evitarlo.
En Barcelona, Iñaki Urdangarin ya no tiene sitio. Hasta los amigos de ambos se han posicionado al lado de la infanta Cristina. Sus amigos se han hartado de la actitud desafiante del exduque de Palma en sus viajes a Baqueira y Palma de Mallorca.
Iñaki Urdangarin habría anulado algunos viajes a Barcelona que tenía pendiente en estas últimas semanas para comer o tomar un café con algunos amigos del balonmano. Se cree que la infanta Cristina podría estar detrás de este destierro de la capital catalana del que todavía es su marido.