La tragedia del 11-M no dividió España. Lo que la dividió es como afrontaron el 11-M el PP, alguna prensa y, cosa poco dicha, Casa Real. Que Aznar, Acebes y Zaplana mintieron sobre la autoría está demostrado por una sentencia judicial: ni un solo indicio apunta a ETA. Determinada prensa, encabezada por El Mundo y la COPE, esparcieron la trola de ETA para perjudicar a Zapatero y para vender más diarios que ABC o tener más oyentes que Onda Cero, en la guerra por el relato de la derecha. Queda el papel de la Corona. Juan Carlos era rey y no fue a los hospitales a solidarizarse con las víctimas. Felipe lo ha recordado 20 años después en un acto convocado por la Comisión Europea:: “Aquella misma tarde, la reina y yo, entonces a poco de nuestro matrimonio, junto con la reina Sofía, acudimos a 3 hospitales para acompañar a las víctimas en aquellas terribles circunstancias. Recordamos mucho la multitudinaria manifestación al día siguiente en Madrid, en la que más de 2 millones de personas mostramos con nuestra condena más rotunda a los atentados y nuestro absoluto apoyo a las víctimas”. A la manifestación fue el príncipe Felipe, no el rey Juan Carlos. Otra ignominia.
Pero lo peor de la Corona y aquel 11-M testaba por venir. La boda de Felipe y Letizia tenía que celebrarse dos meses después de los atentados, el 22 de mayo. No solo no se cambió la fecha, con España en pleno luto, sino que por el incidente en un aeropuerto se supo que Felipe y Letizia, en pleno drama nacional, cogieron unos amigos, unos escoltas, unas maletas y se marcharon de vadespedida de soltero a las Bahamas. Una vergüenza que la prensa silenció, como con el escándalo Del Burgo. Solo algunos lo recuerdan, como hizo Pilar Eyre en su blog: "Los novios tenían preparado un viaje de despedida de solteros al Caribe. En atención al atentado del 11 de marzo en Atocha se comunicó que lo habían anulado. Pero una agencia extranjera se hizo eco de que “en Miami, Felipe de Borbón y su prometida Letizia Ortiz, que procedían de Bahamas, donde habían estado de vacaciones con un grupo de amigos y cuatro guardaespaldas, tuvieron un incidente en el aeropuerto por entender que los controles sobre sus maletas eran excesivos”. EEl párrafo contiene toda la vergüenza posible de quién son Felipe y Letizia.
Veinte años después conviene recordar que Zarzuela también mintió en eso, informó que Felipe y Letizia cancelaban una frivolidad como una despedida de soltero conjunta, pero en realidad sí quisieron marcharse en secreto a tomar el sol al Caribe a pesar del luto. Se fueron con 200 muertos sobre la mesa en los 2 meses que hay entre los atentados y la boda. Si se supo es por otra vergüenza, el numerito que montó Letizia con los escoltas porque en el aeropuerto de Miami les hicieron el control de maletas a pesar de ser los príncipes de un país europeo. Así las gastan en los EE.UU. en tiempos posteriores al 11-S. El show de Letizia en el aeropuerto llegó a una agencia de noticias y como la agencia no era española, lo publicó. En España silencio total, autocensura marca de la casa. Veinte años después siguen ocultando la realidad pero con una diferencia: Felipe y Letizia ahora celebrarían no ela despedida no de solteros sino de casados.