Iñaki Urdangarin ha rehecho su vida con Ainhoa Armentia. Llevan casi cinco años de feliz relación y no hay síntomas de agotamiento. Parece que ambos están hechos el uno para el otro. El matrimonio entre el exjugador de balonmano y la infanta Cristina ya no funcionaba desde hace mucho tiempo. El caso Nóos acabó de erosionar a la pareja. Se mantenían unidos por la situación y por sus cuatro hijos en común, pero una vez que Iñaki entró en prisión tenía claro que quería apartarse para siempre de los Borbón.
Hace tres años empezó una verdadera batalla legal para divorciarse de la infanta Cristina. La hija de la reina Sofía se sintió humillada y traicionada, y no iba a permitir que Iñaki Urdangarin se saliese con la suya, no iba a ceder, pero Casa Real tuvo que intervenir. Fue Juan Carlos I quien finalmente llegó a un acuerdo con él y le pagó el dinero pactado por su silencio. Había que garantizar que el padre de Pablo, Juan, Miguel e Irene nunca diría nada sobre el caso Nóos ni de la Casa Real.
Irene Urdangarin pide que Ainhoa Armentia no esté en casa
A día de hoy Iñaki Urdangarin vive como un rey. Asegura que solo ingresa los 900 euros de pensión por haber estado en prisión. No ha buscado trabajo pero ha creado su propia empresa de coaching. No se explica entonces cómo puede mantener una vida de millonario y Ainhoa Armentia también ha dejado su trabajo en el bufete de abogados. Según Juan Luis Galiacho, Iñaki habría cobrado dos millones de euros en concepto de indemnización, dos transacciones desde Suiza de un millón de euros cada una, por el libro que le ofrecieron escribir y al que renunció. Además de 25.000 euros mensuales de por vida, que ahora mismo financia el emérito, pero el día de su fallecimiento será la infanta Cristina quien continuará con estos pagos.
Iñaki Urdangarin no ha conseguido todavía su propósito. A él le gustaría formar una familia con Ainhoa Armentia, y no teniendo más hijos porque por la edad es algo complicado, sino juntando a los hijos de ella con los de él, pero no son muy bien avenidos. Los hijos del exjugador de balonmano piden ver a su padre por separado.
Según ‘Vanitatis’, Irene Urdangarin ha pasado unos días con la infanta Cristina y sus hermanos, y después se ha marchado a Vitoria con Iñaki Urdangarin para demostrar que su relación es buena, pero no tanto con Ainhoa Armentia. Los Urdangarin la han excluido de las vacaciones. Prefieren pasar tiempo con su padre en solitario.
