La última hija de Carolina de Mónaco ha sido apodada como la princesa desconocida, sin embargo, esa misma discreción la ha hecho disfrutar de una vida más familiar. Es conocida como la Grimaldi con más títulos nobiliarios, ya que sus padres la han dotado de un sinfín de títulos y relaciones monárquicas en 3 países: Mónaco, Alemania y Reino Unido. Sin embargo, a pesar de ese currículum, Alexandra de Hannover se distingue por llevar una vida tranquila
El perfil de Instagram de Alexandra de Hannover es una ventana a su mundo interior, un mundo lleno de libros, pensamiento crítico y una clara intención de alejarse del estereotipo de la princesa superficial. Pese a su interés por la literatura, muchos han comenzado a preguntarse en por qué la hija menor de Carolina de Mónaco se esfuerza tanto por destacar su faceta intelectual, y una de las respuestas que ha surgido en los medios internacionales es que podría tener un complejo de inferioridad intelectual, una sensación de que, a pesar de su posición y privilegios, necesita demostrar que hay más en ella que una cara bonita.

La joven monegasca estudió Ciencias Políticas y Filosofía en Nueva York y actualmente cursa estudios de Historia y Literatura en París. Gran aficionada de pequeña al patinaje artístico, llegó a ser campeona en esta disciplina, pero tuvo que dejar de lado esta pasión en favor de su formación intelectual. Convertida ahora en una admirada fashionista pero todos estos estudios parece que no le bastan y no se siente cómoda.
En los últimos años ha ido escalando puestos en popularidad y estilo revelándose como una digna sucesora de su madre y su hermana Carlota. De hecho, es la única princesa real de palacio, ya que sus hermanos por parte de madre no ostentan títulos nobiliarios. Se ha dicho que Alexandra es el ojito derecho de Carolina, algo que ha confirmado con el paso de los años con su protección.
Alexandra de Hannover y su deseo de diferenciarse
La hija de Carolina no solo heredó su estilo y gracia, sino también una presión por sobresalir en un ámbito que va más allá de lo superficial. La moda y el lujo han sido parte de su vida desde que nació, pero se ha esforzado por demostrar que es más que una simple embajadora de marcas como Dior y Chanel. Este interés genuino por la cultura y la literatura podría verse como una forma de Alexandra de afirmar su identidad y su valor en un mundo donde la superficialidad a menudo se asocia con el lujo.

La hija de Carolina de Mónaco le gusta organizar fiestas temáticas
Al parecer, una de las grandes aficiones de la nieta de Grace Kelly, según se desprende de la conversación que mantuvo con la firma de moda The Irish Twin, es ser anfitriona. Una afición que como la lectura, ha heredado de su madre. Lo más curioso es que le gusta especialmente organizar fiestas temáticas de crímenes, en las que los invitados deben descubrir al autor de un asesinato.