Felipe VI tiene mucho peor imagen que Leonor. Aunque en twittter muchos ciudadanos de Zaragoza difundan  las fiestas nocturnas de la princesa y la graben en discotecas de madrugada, toda España está más satisfecha con el papel y la imagen de la princesa que con el monarca. Felipe es lo que es: un hombre sobrepasado, a quien la Corona le pesa, que la ha recibido antes de tiempo por presiones a Juan Carlos y que mantiene un matrimonio fake, donde la reina le ha engañado repetidamente con un amigo íntimo Jaime del Burgo. La censura en los medios del peor momento de Felipe aumenta la sensación que está tocado, que no vale y que su abdicación en Leonor es más próxima de lo que muchos piensan. La hija ha demostrado más madera, preparación y talante que el padre. Un detalle resulta especialmente significativo para los catalanes: el idioma. Leonor habla un catalán impecable, con acento, dicción, seguridad y aplomo. En cambio, Felipe sigue insultando al catalán cada día en la web oficial de Casa Real:

Web Casa Real en valenciano (sic)
Web Casa Real en valenciano (sic)

Según destaca Monarquía coinfidencial, el rey mantiene la web en doble versión: catalán y valenciano, como si se fueran dos lenguas diferentes. No existe ni un solo experto que niegue la unidad de la lengua y que el valenciano es la manera de referirse al catalán hablado en la Comunidad Valenciana, como una variante dialectal de la lengua. Zarzuela no quiere ser respetuosa con las variedades del catalán, la web no está en mallorquín, tortosino y leridano. Está en valenciano para satisfacer a los blaveros, los fachas valencianos que se niegan a reconocer que hablan catalán, como el cantante Francisco. Indocumentados, y ahora también en Zarzuela, que escribe un texto de Felipe donde la única diferencia en las dos versiones es decir "seua neutralitat" en "valenciano" (sic) y "seva neutralidad" en catalán. Zarzuela anticatalana, una vez más.

Felipe mala cara coche GTRES
Felipe mala cara conduciendo, GTRES


Dice el diario promonárquico que"El Gobierno de Pedro Sánchez considera que el catalán y el valenciano son una misma lengua. Quien no ha variado de postura sobre política lingüística es la Casa del Rey. Cada año, la Casa publica en su web el texto del mensaje de Navidad del rey, que se emite el 24 de diciembre. De nuevo este año ha colgado seis versiones del discurso: en castellano, en catalán, en euskera, en gallego, en valenciano y en inglés. Hay diferencias a lo largo del discurso:“tothom”, “avui”, “aquesta” y “desenvolupament”, en catalán es “tots”, “hui”, “eixa” y “desenrotllament”, en valenciano". Seis palabras diferentes de un discurso de miles de palabras. Felipe VI catalanófobo. Da igual cuando leas eso. Que venga Leonor ya. Incluso borracha es mil veces mejor que el padre.

Letizia bebe sidra GTRES
Letizia bebe sidra GTRES

Letizia aprendió catalán en el camping de la costa Brava

Pilar Eyre explicaba en el 2015 que en un acto a los Premios Princesa de Girona "A Felipe, consciente del ambiente hostil, le tiemblan las manos mientras lee un discurso que parece no interesar a nadie. Un chico le interrumpe burlón, "¿quiere ser nuestro Rey y no sabe hablar catalán?". Risas, desconcierto, los ojos del Príncipe son dos polillas asustadas por la luz revoloteando por el recinto, tartamudea, "lo estoy aprendiendo, el gallego se me da mejor, el euskera es muy difícil...", hasta que Letizia echa mano de su voz profesional para explicar que, "más que hablar todas las lenguas del Estado, tenemos que trabajar con eficacia..." ¡y lo dijo en perfecto catalán! Con sorna, el joven impertinente le espetó, "usted lo ha aprendido en su palacio con profesores que pagamos nosotros" y aquí Letizia se le pusieron dos rosetones en las mejillas y alzó el tono, "¡cómo? ¡Yo he aprendido el catalán en los campings, mi hermana estudiaba en Barcelona y todos los veranos recorríamos la Costa Brava con nuestras mochilas!". El chico aún rezongó con grosería... "Sí, ya sabemos que usted es muy conocida en los campings..." pero un aplauso atronador borró sus palabras y Letizia se apuntó su primer tanto en esta tierra. ¡Sí, aquí, en el lejano nordeste!".