Hace un año que Casa Real obligó a la infanta Elena a tomar medidas drásticas con Froilán tras ponerse continuamente en el foco mediático. En las últimas ocasiones estuvo involucrado en una pelea con arma blanca a las puertas de una discoteca en el barrio de Salamanca la madrugada del 25 de diciembre. Un mes más tarde fue desalojado de un after ilegal que superaba el aforo permitido y tenía licencia de sauna, en la habitación en la que se encontraba el hermano de Victoria Federica con unos amigos encontraron algunas sustancias estupefacientes. El joven acumulaba cuatro días de fiesta sin descanso. Estaba dañando su imagen, y peor aún, la de la corona.
La infanta Elena habló seriamente con Juan Carlos y el emérito se comprometió a hacerse cargo de su nieto favorito. Le buscó un trabajo como becario en una conocida petrolera donde tiene contactos, cobraba 7.500 euros mensuales, hasta que se quedó en paro al acabarse el contrato. El emérito también le buscó un piso de lujo, 500 metros cuadrados, lo pagaba íntegramente su abuelo.
Ahora mismo Juan Carlos está moviendo sus hilos para buscarle un nuevo trabajo ya que no está previsto que Froilán vuelva a España a corto plazo, solo de visitas. Ahora mismo a la infanta Elena le beneficia que su hijo esté fuera de su país para el momento en el que deba heredar la herencia de su padre, así podría quedarse fuera de la Hacienda Pública.
Froilán no tiene ninguna prisa por encontrar un nuevo trabajo
Poco a poco parece que Froilán empieza a centrarse y a madurar. "Quiere estudiar un posgrado de gestión de empresa en el país (...) se ha dado cuenta de que sus condiciones laborales pueden mejorar si tiene estudios más específicos", explicó entonces la periodista Silvia Taulés.
‘Monarquía Confidencial’ confiesa que Juan Carlos no cesa en su intento de buscar un nuevo trabajo a Froilán. “No ha habido novedades en la situación profesional de Froilán, pero su abuelo no desiste en seguir haciendo uso de sus contactos para ver dónde puede encajar su nieto”. “Es mucho más maduro. En cuanto a idiomas, está muy bien preparado y en el resto ha adquirido mucha experiencia, pero hay veces que la oportunidad se hace esperar más de lo debido”, confiesan al citado portal fuentes cercanas al emérito.
‘Monarquía Confidencial’ apunta que "el sobrino de Felipe VI forma parte de un grupo de amigos españoles e internacionales con los que comparte salidas a restaurantes y a locales de ocio que suelen estar en los hoteles”. Además, "juega al pádel, y un par de veces por semana se ve con el rey emérito”. Es su nieto favorito y nunca le va a faltar de nada mientras él esté vivo, como al resto de sus nietos. Juan Carlos ha pagado los estudios a todos a excepción de Leonor y Sofía, y les ha regalado un coche cuando han cumplido la mayoría de edad. También se encarga de pagarles el alquiler de sus viviendas o la compra de alguna de ellas.
Todos los nietos de Juan Carlos, a excepción de Leonor y Sofía, reciben un sueldo mensual por parte del emérito, hasta 10.000 euros para que puedan vivir holgadamente y permitirse algún que otro capricho. Por este motivo no les hace falta trabajar. Ni a Irene ni a Miguel, dos más que ingresarían este sueldo.