Felipe VI y Letizia han empezado el curso institucional más potente que nunca. A pocas semanas de dar el pistoletazo de salida con el mes de septiembre han programado su primer viaje de Estado a Egipto para estrechar los lazos históricos, ya del tiempo de la reina Sofía. Los monarcas se han reunido con el príncipe de Egipto y su primera dama, con los que han compartido prácticamente estos tres días juntos. Llegaron el martes por la tarde, aunque el recibimiento oficial fue el pasado miércoles. Este viernes dan por finalizada su estancia con la visita a Luxor, una de las zonas más turísticas. Con honor a la visita de los monarcas, Felipe VI y Letizia tuvieron el placer de inauguran en Luxor la nueva iluminación del templo de Hatshepsut.

La noche anterior pudieron disfrutar de las pirámides de Guiza al atardecer. Abdelfatá al Sisi les llevó a un sitio clave, la terraza del Hotel Mena House, donde cenaron los cuatro juntos. Después de esa cena mientras se escondía el sol, totalmente iluminadas, Felipe VI y Letizia visitaban las pirámides de Keops y la Esfinge. Durante el recorrido, han estado acompañados por Ashraf Mohie, el director arqueológico de la zona.
Todo este viaje de los reyes ha sido fotografiado y compartido en Casa Real. Letizia ha aguantado el tipo durante todos los días, algo que no sucedió en el viaje de Estado a Holanda el curso pasado. Es cierto que en esta ocasión ha sido mucho más precavida. No solo se le han ofrecido momentos de descanso durante el día, sino que además ha visitado a su médico para unas inyecciones en el pie que le permitan aguantar más tiempo.
¿Qué es el Neuroma de Morton? La dolencia que padece Letizia
Letizia sufre una dolencia en el pie denominada ‘neuroma de Morton’, es una sensación de dolor que nunca desaparece, como si tuvieses siempre una pequeña piedra dentro del zapato. Esta afección le ha venido por utilizar el tacón alto. Por ello, aunque le estiliza mucho y puede ponerse a una altura más cercana a la de Felipe VI, los médicos se lo prohibieron de forma rotunda y no lo ha vuelto a utilizar en ningún acto.
Realmente debería pasar por quirófano, algo que de momento no se ha confirmado que haya hecho. Es probable que no haya pasado por el quirófano para no tener que paralizar su agenda institucional y levantar muchas especulaciones, al final tendría que dar alguna explicación. Por ello, todos los años se realiza una serie de infiltraciones para paliar el dolor.
El neuroma de Morton ha dado demasiados quebraderos de cabeza a la reina con su agenda institucional, y en ocasiones le ha hecho quedar muy mal, como sucedió en su viaje de Estado a Holanda, algo que no pudo soportar. Sintió una gran vergüenza. Felipe VI fue quien comunicó al príncipe de Egipto y a la primera dama la situación y les pidió una serie de descansos entre visita y visita.
