El pasado 12 de septiembre tuvo lugar un evento muy especial en restaurante del Centro Nacional de Golf Emma Villacieros. Una cita que llevaba varios años sin tener lugar a causa del coronavirus y que buscaba recaudar fondos para la Fundación Recal.

Esta fundación tiene como misión luchar por la desintoxicación. Y la cita mencionada consistía en una cena de gala a la que acudieron personalidades que no suelen faltar como Jaime de Marichalar, Cayetano Martínez de Irujo, María Chávarri o José Manuel Entrecanales, presidente de Acciona. Pero por encima de estos nombres brilló el del archiduque Maximiliano de Habsburgo, que en su momento pasó de codearse con celebridades como la reina Letizia, su primo el rey Felipe o los mencionados a confesar su adicción a las drogas.

Archidique Maximiliano de Habsburgo
Archiduque Maximiliano de Habsburgo / Fundación Recal

La adicción a las drogas no entiende de clases sociales

De hecho, su abuelo paterno era hermano de Carlos I, rey de España y último emperador de Austria, mientras que su tatarabuelo materno fue el rey Jorge de Grecia, bisabuelo de la reina Sofía. Y aseguraba en una entrevista para la revista ¡HOLA! que el Rey Felipe es una persona a la que admira mucho, que considera con una “preparación perfecta” y que tiene “un gran corazón”.

El archiduque Maximiliano de Habsburgo fue el fundador y actualmente es director de Recal. Y el motivo de la iniciativa del aristócrata fue que en su momento él también estuvo enganchado a sustancias ilegales.

Fue hace más de veinte años cuando Maximiliano de Habsburgo puso en marcha la Fundación. Concretamente en 2001, después de la muerte de su hermana Elizabeth, que también fue adicta. Y el objetivo de la organización es luchar contra el alcoholismo y la drogadicción.

El archiduque Maximiliano de Habsburgo habla de su adicción a las drogas

Actualmente el archiduque vive en Inglaterra. Hijo de los archiduques Ferdinand y Helen de Austria y casado con Maya Askari, escritora y bisnieta de Jafar al-Askari, exprimer ministro de Irak, es padre de tres hijos: Nikolaus, Constantin y Katharina. Y tiene su vivienda habitual en el Reino Unido. Pero viaja a España con frecuencia. Sobre todo para dirigir la fundación. Y uno de los motivos que le trajo a este país el mes pasado fue la mencionada cena de gala.

“Hoy mi labor es ayudar a otros a recuperarse”, señala Maximiliano de Habsburgo en una entrevista para LOC. “Creo que para el adicto, y uno es adicto ya de por vida, porque esta enfermedad no tiene cura, solo se puede detener al no consumir, lo mejor son los grupos de autoayuda de Alcohólicos y Narcóticos Anónimos, porque el que atiende a esos grupos con regularidad no suele caer”, señala el archiduque, que ahora pone su granito de arena para evitar que otros pasen por el calvario que él atravesó.