Carolina de Mónaco, reconocida por su elegancia y estilo impecable, ha sorprendido a todos con su última aparición pública. La mayor de los hermanos Grimaldi, conocida por su exquisito gusto en la moda, dejó perplejos a los espectadores con su apariencia descuidada y su pelo visiblemente sucio. Durante un evento de arte en el 'Grimaldi Forum' de Montecarlo, las fotografías compartidas en la cuenta de Instagram 'Miss nostalgiamc' revelaron un peinado deslucido y con exceso de grasa. Debido a esto, la prensa francesa no ha dudado en criticar duramente a la princesa, acusándola de tener el pelo excesivamente grasoso e incluso la han señalado por descuidar su higiene personal.

¿Exceso de grasa o ‘efecto mojado’?

Expertos en estilismo afirman que Carolina intentó disimular sus raíces grasas utilizando el popular ‘efecto mojado’ en su peinado, también conocido como 'Wet Look'. Sin embargo, lejos de lograr el resultado esperado, solo acentuó la apariencia apelmazada y descuidada de su melena. Y es que el pelo graso es consecuencia de un cuero cabelludo con exceso de secreción sebácea, lo que da la sensación de suciedad y falta de cuidado.

Carolina de Mónaco
Carolina de Mónaco

A pesar de este desliz estilístico, Carolina de Mónaco logró compensar su apariencia descuidada con la elección de su atuendo. Su estilo atemporal y sofisticado siempre ha sido elogiado, y esta vez no fue la excepción. La princesa de Hannover se ha destacado como una de las mujeres mejor vestidas del mundo, dejando una huella imborrable en la industria de la moda, convirtiéndose en la musa del legendario káiser de la moda, Karl Lagerfeld, durante décadas, dado que la hermana mayor del príncipe Alberto de Mónaco ha sido una apasionada de la moda francesa a lo largo de los años, y ha mantenido una estrecha relación con prestigiosas firmas como Chanel. Por eso, en sus apariciones públicas, la 'royal' suele lucir prendas de la maison, demostrando su gran predilección por esta firma.

Look atemporal y sofisticado

En esta ocasión, la princesa de Hannover lució un conjunto muy veraniego en color blanco, compuesto por una falda y una camisa de manga larga. A pesar de los comentarios sobre su cabello, el estilismo de Carolina destacó por sus líneas limpias y su impecabilidad. La falda midi, adornada con hermosos bordados de flores, combinaba a la perfección con la camisa blanca remangada. Como toque final, Carolina optó por los icónicos zapatos destalonados bicolor de Chanel, en blanco y negro, con un tacón cómodo y elegante.

A pesar del revuelo causado por su melena descuidada, no hay duda de que Carolina de Mónaco sigue siendo una figura influyente en el mundo de la moda. Su estilo elegante y su capacidad para combinar prendas clásicas con toques modernos continúan inspirando a mujeres de todo el mundo. Aunque su pelo en esta ocasión no estuvo a la altura de su reputación, su impecable elección de vestuario demuestra que la mayor de los Grimaldi sigue siendo una referencia en la industria de la moda.