Anteriormente, el príncipe Andrés gozaba de cierta tranquilidad mientras su madre, la reina Isabel II, aún vivía. Ella era su mayor defensora y lo respaldaba tanto en público como en privado, por lo que era evidente que sentía una gran predilección por su hijo más polémico. Sin embargo, con el ascenso al trono de Carlos III, el duque de York ha tenido que enfrentarse a su propio hermano para mantener un estatus que el resto de la Familia Real desea ver desaparecer. A pesar de que el padre de Beatriz y Eugenia ha descartado la idea de escribir su propia autobiografía, como lo hizo el príncipe Harry, eso no significa que no esté dispuesto a luchar contra el nuevo monarca.

El recorte del subsidio: ¿un golpe financiero para el príncipe Andrés?

Toda historia comienza con un tijeretazo a las finanzas del príncipe Andrés. Carlos III, decidido a imprimir su sello personal en la monarquía británica, ha tomado una drástica medida al recortar la generosa asignación anual de 285.000 que le otorgaba su difunta madre. Este recorte ha dejado a Andrés en una situación financiera muy comprometida, dado que ahora es incapaz de mantener el lujoso estilo de vida al que está acostumbrado en su mansión de ‘Royal Lodge’, ubicada en los terrenos del Castillo de Windsor.

Tras esta noticia, la furia y la resistencia del duque de York han alcanzado niveles insospechados, dado que se niega rotundamente a abandonar su residencia, a pesar de las presiones de su hermano. Y es que Carlos III tiene grandes planes para ‘Royal Lodge’, ya que quiere convertirla en el nuevo hogar del príncipe Guillermo, Kate Middleton y sus tres hijos, George, Charlotte y Louis. Pero Andrés no está dispuesto a ceder ni un centímetro de su hogar, así que no aceptará mudarse a ‘Frogmore Cottage’, la casa que le pertenecía a los duques de Sussex. La situación se ha vuelto tan tensa que los rumores de un enfrentamiento entre ellos han comenzado a circular por los pasillos palaciegos. El duque de York se ha convertido en un hombre solitario y triste. "Andrés es tan frágil... Se niega a ver a nadie. Esta ha sido la casa de su familia durante los últimos 20 años. ¿Es realmente sensato echarlo?", reveló un amigo cercano.

Negociaciones en la sombra: funcionarios en Lugar de Hermanos

Pero las llamas del conflicto no se apagan ahí. La falta de comunicación directa entre los hermanos ha complicado aún más la situación. Las negociaciones, en lugar de ser personalmente, se llevan a cabo entre funcionarios del Palacio de Buckingham. Esto ha provocado una gran frustración en Andrés, quien no descansará hasta hablar personalmente con Carlos III. De hecho, los amigos cercanos del duque de York claman por un encuentro directo entre los hermanos para resolver este conflicto. "¿Por qué Carlos no invita a su hermano a una reunión y le pregunta si dejaría Royal Lodge para ayudar a su sobrino y al futuro de la monarquía? Y acordar un horario aceptable para ambas partes", propuso uno de ellos, pero esta reunión está cada vez más lejos de llevarse a cabo.