Camilla Parker-Bowles se encuentra enfrentando una situación incómoda y tensa, debido a los crecientes rumores de divorcio entre el príncipe Harry y Meghan Markle. La relación entre Camilla y su hijastro, el príncipe Harry, ha sido tensa desde el principio, pero se ha vuelto aún más problemática después de que Harry se refiriera a ella como 'madrastra malvada' y 'mujer peligrosa' en su controvertido libro de memorias titulado 'Spare' ('En la sombra'). Además, el hijo pequeño de Carlos III ha expresado abiertamente su descontento con la presencia de la ex amante de su padre en la Familia Real debido al daño que él considera que le hizo a su madre, Lady Di. Ahora, ante la noticia de un posible divorcio entre Meghan y Harry, Camilla parece estar determinada a mantener al príncipe Harry en el exilio, alejado de sus responsabilidades reales, dado que no quiere tenerlo de vuelta en el Palacio.

Los medios británicos han sugerido que Camilla Parker Bowles podría sentirse inquieta ante la posibilidad de tener que lidiar con la rebeldía del príncipe Harry. Por esta razón, preferiría mantenerlo alejado de la Casa Real para poder continuar manejando los asuntos reales a su antojo. Además, se ha especulado que la Corona británica habría ofrecido a los duques de Sussex dos opciones para definir su futuro: un exilio definitivo en Estados Unidos o el divorcio, permitiendo así que Harry pueda regresar a su hogar.

El plan del rey Carlos III para alejar a Archie y Lilibet de Meghan Markle

Sin embargo, los planes del rey Carlos III son diferentes. Según la prensa británica, Meghan Markle estaría exigiendo una exorbitante suma de 80 millones de dólares al príncipe Harry para la manutención de sus hijos en caso de divorcio. Ante esta situación, el rey Carlos III estaría dispuesto a tenderle la mano a su hijo para evitar que Meghan obtenga tal cantidad y, en consecuencia, quitaría la custodia de los pequeños a la ex actriz. Esta medida tendría como objetivo alejar a los niños del foco mediático y de las controversias que han rodeado al matrimonio del príncipe Harry y Meghan Markle, manteniéndolos más cerca del núcleo de la Familia Real.  

El papel de la Corona británica en el divorcio de los Sussex

A pesar de los conflictos pasados, el rey Carlos III y el príncipe Guillermo están dispuestos a ayudar a Harry en su proceso de divorcio con Meghan. De hecho, fuentes cercanas a la Casa Real aseguran que el príncipe de Gales voló a Estados Unidos para asesorar a su hermano en su separación. Además, la Familia Real ha ofrecido apoyo en lo que respecta a los problemas económicos que puedan surgir para Harry tras el divorcio. El futuro de Meghan y Harry sigue siendo incierto, y la lucha entre Camilla y Harry añade más leña al fuego de esta enredada historia. Los medios y el público esperan ansiosos por conocer cómo se resolverán los conflictos y qué decisiones tomará la Familia Real británica ante una posible separación que podría tener grandes repercusiones en el seno de la monarquía.