El Poblenou de Barcelona ha vuelto a brillar con más fuerza que nunca este fin de semana con el Llum BCN, una de las citas culturales más esperadas de la ciudad. El festival de artes lumínicas ha reunido a más de 200.000 personas en esta duodécima edición y, como siempre, ha expuesto obras que no han dejado indiferente a nadie: desde las más rompedoras que han sacudido todos los sentidos hasta las más poéticas y reflexivas que han cautivado a todos los espectadores. Además, en esta ocasión, el festival ha contado con el apoyo de Yamaha, que, además de ser el patrocinador principal, ha abanderado el proyecto lumínico Yamaha Light Meeting Point, realizado por alumnas del máster de Arquitectura Efímera de la UPC (Universidad Politécnica de Catalunya) escogidas mediante un concurso de talento y supervisados por Saeta Estudio.

yamaha meeting point
La obra 'Velocidad y control' / Yamaha

Velocidad y control

Llum BCN, aparte de ser uno de los festivales lumínicos más importantes de Europa y un punto de encuentro e intercambio entre profesionales, es también una propuesta innovadora que apuesta por la presencia y el fomento de proyectos provenientes de las escuelas de diseño y arquitectura de Barcelona como cantera del talento creativo local. Es por este motivo que Yamaha decidió crear el proyecto Yamaha Light Meeting Point.

La marca realizó varios workshop con un centenar de alumnos de varios centros ya que, para la compañía, "querer promocionar el talento juvenil de aquí no es solo dotar de recursos económicos a los estudiantes, sino también proporcionarles una buena formación y las mejores herramientas". Finalmente, Barbara Marshall, Amy Labastida, Elisa González-Aréchiga, Javiera González y Carolina Contreras, originarias de México y Chile, fueron las arquitectas e ingenieras escogidas para dar vida al proyecto colectivo 'Velocidad y Control', nacido de un análisis profundo de las sensaciones que se generan a partir de la velocidad.

Foto WORKSHOP PROYECTO YAMAHA LUZ BCN 3 (002) (1)
El workshop que se hizo con los alumnos para escoger el proyecto ganador

Bajo esta premisa, las creadoras quisieron provocar una experiencia de adrenalina, mezcla de emoción, placer y energía a los visitantes y lo hicieron a través de la interacción de las personas bajo un efecto de espejos reflectores confrontados (con un efecto espía no totalmente opaco) que generaban la ilusión de un túnel infinito de luz mediante una superposición de grandes anillas. Para hacerlo, crearon una secuencia de círculos con una iluminación led programada y limitada por dos grandes espejos circulares que todavía aumentaban más la sensación de huida.

En este vertiginoso túnel visual quedaban enmarcadas dos motocicletas de Yamaha que las personas visitantes podían utilizar para atravesar virtualmente esta estructura de huida e incorporar su propia imagen a la experiencia visual. Era como un juego entre la ciencia-ficción — evocación lejana de la carrera de motos de Tron- y la nostalgia de las atracciones de siempre.

yamaha meeting point
Varios visitantes disfrutando del Yamaha Light Meeting Point / Yamaha

El compromiso de Yamaha

Yamaha da apoyo así a los artistas emergentes como aparte de su política de RSC, en relación estrecha con el ámbito cultural y educativo de la ciudad. Según Víctor González, director general de Yamaha Motor España "para nosotros es un honor estar vinculados, a través de nuestro patrocinio principal, a uno de los festivales de artes lumínicas y digitales más importantes de Europa".

"Llum BCN congrega dos entornos esenciales para Yamaha: la innovación tecnológica y el diseño, los dos atributos intrínsecos a nuestra esencia empresarial. Además, nos da la oportunidad de reconfirmar nuestra relación emocional con Barcelona, una ciudad motard por excelencia, dando apoyo a un proyecto que no solo hace compatible la educación con la cultura, sino que además se erige en una atracción turística de primer orden", añade.

Yamaha, compromesa amb Barcelona
Yamaha, comprometida con Barcelona / Yamaha

Llum BCN 2023

La duodécima edición del Festival Llum BCN, que este año iba de la mano de Yamaha, ha recibido a más visitantes que nunca: 200.000, según el Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB). El certamen ha convertido el barrio del Poblenou en un polo de atracción de actividad cultural y de espectáculos luminosos de alta calidad, según los organizadores. En total, se han podido ver 13 instalaciones, muchas de las cuales de creadores internacionales vinculados a la luz. El festival ha hecho una apuesta por la sostenibilidad y por eso este 2023 ha tomado medidas para reducir la intensidad de las piezas, ha promovido el uso de energías renovables para alimentarlas y ha favorecido la producción local.