Varapalo judicial a los tribunales españoles. La justicia belga ha rechazado la extradición de los consellers Meritxell Serret, Toni Comín y Lluís Puig. Los tres han comparecido este miércoles ante la justicia de Bélgica por la euroorden de detención que emitió el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena. El motivo detrás de todo es un defecto de forma en la euroorden.
La decisión representa un nuevo golpe al juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena, que activó la orden europea de detención el pasado mes de marzo. La justicia de Bélgica ha decidido no efectuar la entrega al estado español de los tres consellers por defectos de forma en la euroorden, según ha explicado el propio Comín, lo que pone de nuevo en entredicho los procedimientos de la justicia española en el caso 1-O. La Fiscalia belga ha confirmado a través de un comunicado que el error de Llarena ha sido el causante de la anulación por parte de la justicia belga.
La justicia belga ha determinado que las partes pueden recurrir la decisión, pero lo destacable es que las autoridades españolas no podrán hacerlo, según ha informado la fiscalía.
¿Qué ha fallado? En la documentación que se envió contra los consellers a Bélgica por parte de Llarena no aparece ninguna orden de detención de ámbito español, según ha explicado el propio conseller Comín. Este error, según ha expuesto su abogado, Gonzalo Boye, en declaraciones a El matí de Catalunya Ràdio, entra en contradicción con la norma establecida. Y es que hace falta una orden de detención de ámbito doméstico antes de poner en marcha una europea.
Queda pendiente saber ahora si se mantienen las medidas cautelares por los consejeros en Bélgica. Según fuentes judiciales, cuando la justicia belga se pronuncie por escrito hoy. Del mantenimiento de las medidas cautelares depende el voto delegado autorizado de Toni Comín, el único de los tres exiliados en Bélgica que sigue siendo diputado en el Parlament.
"Llarena hace las cosas deprisa y mal", ha dicho Boye sobre el juez del Supremo, a quien ha culpado de haber llevado la euroorden al desastre. El abogado considera que la justicia española "no se puede permitir más ridículos" después de la última decisión de la justicia belga.
Celebración de los consellers
"Se ha hecho justicia", ha celebrado el conseller Toni Comín en una atención a los medios posterior a la vista. Comín, muy crítico con el papel del estado español, ha lamentado una supuesta instrumentalización del Código Penal que, según el conseller de Salut destituido, se está utilizando contra los líderes independentistas.
"Queremos dar un mensaje constructivo al Tribunal Supremo y al Estado: Europa le está diciendo que abusa del sistema de euroórdenes y del Código Penal. Basta", ha sentenciado Comín sobre la nueva bofetada de la justicia belga al juez Pablo Llarena.
La decisión ha llegado justo después de una cita a la Cámara del Consejo de Bruselas, la primera instancia judicial belga. La audiencia ha empezado aproximadamente a las 9 horas y ha sido bastante breve, en la que ha sido la segunda ocasión que los políticos acudían ante el tribunal belga.
Fotografías: ACN
Al salir del tribunal, los consellers y sus abogados han ido a celebrar el rechazo a la extradición brindando en una terraza. "En honor a Bob-Dogi", concretó el abogado Gonzalo Boye en un tuit en el que ha compartido la imagen dle momento. Bob-Dogi es el caso de un camionero rumano que ha servido de precedente para rechazar la extradición.
En honor a #BobDogi pic.twitter.com/cdTQlx2wjP
— Gonzalo Boye (@boye_g) 16 de maig de 2018