El juez Pablo Llarena ha aprovechado la incomparecencia de Anna Gabriel para redactar el auto de Marta Rovira donde da a la secretaría general de ERC 10 días para pagar la fianza de 60.000 euros.

También la obliga a presentarse cada 15 días en el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya o en el juzgado más próximo a su casa. Además, Llarena se reserva el derecho de citarla cuando él convenga al Tribunal Supremo.

En el auto, y a pesar de considerar que la "importancia política" de la figura de Rovira es "coherente" con que tuviera una "función decisoria en la concepción y en la ejecución de un proceso soberanista", Llarena dice que, por lo que se refiere al riesgo de fuga, "se aprecia muy mitigado" por su arraigo personal, familiar y laboral y "por el que ha sido su comportamiento en los últimos meses, que no ofrece indicio de posible ocultación", concreta el texto.

Llarena califica la responsabilidad de Rovira dentro del caso como "una responsabilidad política del mayor nivel", y concreta que no sólo con respecto a ERC, sino porque era la portavoz de Junts pel Sí. "La importancia política de su figura resulta plenamente coherente con que la investigada tuviera una función decisoria en la concepción y en la ejecución de un proceso soberanista".

El magistrado destaca también las declaraciones públicas hechas por la secretaría general de ERC y el hecho de que apareciera en la agenda de Josep Maria Jové como asistente a varias reuniones "donde se debatía la mejor estrategia que se tenía que seguir para conseguir la independencia, adoptándose precisamente las decisiones". Según el magistrado, la documentación que forma parte del sumario demuestra que Rovira impulsó personalmente la tramitación de la ley del referéndum y la de transitoriedad.

Y entre todas las pruebas que cita el magistrado, en el auto están las conversaciones telefónicas en las que aparece Rovira donde se ve como "participaba con una clara capacidad decisoria en la organización y provisión de los centros de votación en los que pretendía celebrarse el referéndum". Son llamadas que se interceptaron del móvil de Jové.

En el escrito dictado este miércoles el juez también acuerda la libertad sin ninguna medida cautelar del expresident de la Generalitat Artur Mas, que compareció ayer y para quien la acusación popular ejercida por Vox pidió una fianza idéntica, retirada del pasaporte y comparecencias quincenales ante el juzgado que Llarena no ha considerado necesarias.