Una vez pasen las elecciones municipales del 26 de mayo, se empezará por toda Catalunya una fase de debate ciudadano que se alargará durante seis meses, hasta finales de 2019. Es la primera piedra del Consejo asesor para el impulso del Foro Cívico y Social para el Debate Constituyente.
El espacio, que nació ahora hace tres meses, ha presentado hoy los primeros trabajos que han llevado a cabo. Primero, en privado, en una reunión con el presidente Quim Torra y después, a los medios de comunicación. El consejo asesor lo integran finalmente una veintena de personas de sectores e ideologías diversas, bajo la batuta de Lluís Llach. El trabajo que han ido realizando desde octubre y que hoy han explicado es trazar una especie de hoja de ruta que focalizan en "recoger las inquietudes de la ciudadanía de cara a la creación de un futuro estado independiente".
¿Cómo, cuándo y dónde?
El mismo Llach ha ironizado sobre la complejidad de entender y comunicar el trabajo que hacen. La premisa con que trabajan es "la obsesión para que este proceso sea lo más participativo y transversal posible" y "que nadie pueda decir que ha quedado excluido".
¿Y cómo lo harán? Pues estructurándolo en dos fases. La primera y esencial es promover por todo el territorio asambleas ciudadanas que debatan sobre cómo se imaginan una Catalunya independiente y qué principios y valores quieren que la rijan. Unos encuentros que tendrán formatos y dimensiones diversas. Desde grupos autoorganizados con un mínimo de 12-15 personas, a convocatorias más amplias y coordinadas a nivel de barrios o distritos. Todas las deliberaciones que resulten se irán introduciendo en una plataforma online.
Estas asambleas empezarán a activarse después de las elecciones municipales, por lo tanto, a partir de este verano, y funcionarán durante un periodo de seis meses.
Concluida esta primera fase, a finales de 2019, se creará un nuevo ente llamado Entesa Nacional y que según ha explicado Llach será equiparable a los Pactos Nacionales que ha habido anteriormente, el del Derecho a Decidir o el del Referéndum. Formarán parte representantes de las entidades y organizaciones más significativas de la sociedad. Este órgano será el encargado de recoger y analizar las propuestas surgidas de la ciudadanía y, una vez estudiadas, convocar el Foro Cívico y Social. Calculan que eso podrá ser durante la primavera de 2020.
Un Foro de entre 1.000 y 2.000 personas
La idea con la que trabaja el Consejo asesor es que el Foro Cívico lo integren "entre 1.000 y 2.000 personas provenientes de grupos diferentes". Una parte serían ciudadanos mayores de 16 años escogidos por sorteo, habría también representantes de entidades y asociaciones de la sociedad civil y finalmente cargos electos municipales, escogidos proporcionalmente en función del resultado de las municipales.
La tarea del Foro Cívico será "elaborar las bases del cuerpo semántico constitucional". Eso, traducido, equivale a decir que empaquetará, distinguirá y discernirá entre las ideas surgidas de la calle para trasladarlas ordenadamente a las fuerzas políticas. Serán los partidos quienes, en base a estos trabajos, deberán llevar al Parlament una propuesta de Constitución Catalana.