"Es una causa que tiene una orientación política, que es criminalizar toda una ideología y todo un movimiento pacífico que está defendiendo una idea que es plenamente legal, que es el del independentismo. Está defendida desde hace muchos años y se está criminalizando para eliminarla del mapa político". Así ha explicado el abogado de Oriol Junqueras, Andreu van Den Eynde, la estrategia de defensa de los procesados. Más dura y sin temer nada.

Hace seis meses que Jordi Sànchez y Jordi Cuixart están en prisión, y hoy, junto con Junqueras, han puesto sobre la mesa las sensaciones que han tenido durante toda la instrucción del caso, que han expresado durante la declaración ante el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena sin pensar en si eso puede perjudicar a su defensa o su situación actual.

Una vez terminadas las declaraciones, Van den Eynde ha expuesto que "la instrumentalización del proceso lo que evita es la necesaria solución política de un conflicto político". El abogado de Junqueras, junto con el de Sànchez y la de Cuixart, ha explicado que la coincidencia del endurecimiento de las intervenciones ha llegado de forma natural después de ver los argumentos que auto tras auto van derivando cada vez más en una ideología política.

Sin estrategia conjunta

La abogada de Cuixart, Marina Roig, ha explicado que no hay una estrategia conjunta, sino que "todas, de forma natural", llegan a la misma conclusión después del cambio de tendencia de las resoluciones que se han ido dictando. "Hoy, con las indagatorias, teníamos la oportunidad de ponerlo de manifiesto", ha dicho Roig.

"Lo que hacemos ahora, con más serenidad que antes, es decir lo que pensamos, y ya es mucho más difícil discrepar. Nos hemos dado cuenta todos de lo que significa este procedimiento y la convergencia es más evidente", ha dicho Andreu van Den Eynde sobre la estrategia de defensa.

El abogado de Jordi Sànchez, Jordi Pina, ha remarcado que la evolución de Pablo Llarena se ve claramente en la redacción y los argumentos de cada uno de los autos: "Hay una retahíla de resoluciones judiciales y los procesados llegan a la conclusión de que realmente no están obteniendo un juicio justo". Y hoy "han transmitido la sensación que han ido teniendo en el transcurso de la investigación. Era una oportunidad de transmitir estas sensaciones", ha expuesto Pina.

Objetividad del instructor

Y es que Jordi Sànchez, según su abogado, tiene "claras dudas sobre la necesaria objetividad del juez instructor", y así se lo ha comunicado hoy al final de su turno de palabra. "Cuando las cosas se dicen con respeto y educación, no tienen por qué ser menos importantes que cuando se dicen gritando", ha concluido Pina.

Justamente Pina es quien más ha notado esta evolución del relato de Llarena, que ha tenido que posicionarse cada vez que se lo han pedido ante un pleno de investidura. "Me permite hacer una comparativa de como vamos evolucionando, a mal, entrando directamente en aspectos claramente políticos", ha dicho Pina, que también ha explicado que esta situación no se puede esconder a los clientes.

Procedimiento político

Los tres abogados mantienen que siempre han tenido una estrategia de defensa política porque tienen muy claro que "este proceso tiene un claro procedimiento político", asegurando que ha habido algunos aspectos de las últimas resoluciones que hablan directamente de la ideología de los procesados. "Cuando le dicen 'a usted no lo dejo salir porque tiene una ideología concreta', podemos decirlo como queramos, lo podemos disfrazar como queramos, pero desde el sentimiento de la persona que recibe este comentario desde una resolución judicial, muy tranquilo y muy sereno no puede quedarse, con respecto a la objetividad de las personas que le estan juzgando", ha expuesto Jordi Pina.

"Un juez de instrucción le ha impedido ser presidente y hay que poder demostrarle que está equivocado. No haría actuaciones delictivas, haría actuaciones desde el diálogo y buscando la concordia", ha remachado el abogado de Jordi Sànchez.