Deliberar sobre la investidura telemática de Carles Puigdemont. Eso es lo que hará al Tribunal Constitucional durante los próximos meses, después de que previsiblemente, y según adelanta hoy La Razón, admita a trámite los recursos del Gobierno de Mariano Rajoy contra una posible investidura a distancia del president en funciones. Como siempre, si el Alto Tribunal lo admite a trámite, ya queda suspendido cautelarmente el pleno de la investidura telemática—ahora aplazado— hasta que acaben de deliberar.

El TC lo admitiría a trámite en caso de que el Ejecutivo invocara el artículo 162 de la Constitución española, que, según las fuentes jurídicas consultadas por el diario citado, es lo que faculta a admitirlo a trámite sí o sí. De momento, tiene que estudiar las alegaciones del Parlament a la decisión del TC que ya tiene en sus manos, alegaciones a la decisión por unanimidad de suspender cautelarmente el pleno de investidura de Puigdemont. Sus magistrados consideraron entonces "imprescindible" que el candidato a la presidencia acuda "personalmente" a la Cámara y suspendía también la posibilidad del voto delegado desde el extranjero.

El Alto Tribunal tiene un plazo máximo de cinco meses para decidir qué hace con la investidura a distancia de Puigdemont, que es el tiempo que quedaría suspendido el debate de investidura. Ahora, sin embargo, buscan ponerse todos de acuerdo y conseguir que haya unanimidad en esta cuestión, ya que, por ejemplo, cuando debatieron el recurso de Rajoy a la investidura de Puigdemont, el magistrado catalán de orientación progresista Juan Antonio Xiol se habría posicionado en un primer momento en contra de admitir el recurso del gobierno del PP.

A la espera de decidir

Ayer, el Parlament presentó estas alegaciones para que el recurso que habían presentado los de Rajoy que exigía la suspensión del pleno de investidura quedara sin efecto porque consideran que las medidas cautelares de suspender la celebración de una investidura a no ser que Puigdemont estuviera presente "tienen un carácter preventivo y puramente hipotético que provocaría que fueran improcedentes".

Eso llega después de que ayer el presidente del Parlamento, Roger Torrent, decidiera dejar fuera del orden del día de la reunión de la Mesa de este martes la propuesta de modificación de la Ley de la Presidencia, presentada por Junts per Catalunya. La decisión de Torrent generó ayer mucho malestar en las filas de JxCat, que quiere reformar la norma para que Puigdemont pueda ser investido a distancia.

El presidente de la Cámara catalana también anunció ayer que pedirá al Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) que garantice un debate de investidura sin injerencias con el fin de "proteger los derechos de Puigdemont a someterse al debate de investidura de forma efectiva".