La periodista y escritora peruana, Gabriela Wiener, ha afirmado mediante un comunicado en el periódico peruano La República, que "en España se están viviendo tiempos franquistas, por culpa de un gobierno mediocre, más nacionalista que los nacionalistas". Esta periodista ha vivido ocho años en Catalunya y siente "asco y rechazo" ante lo que está ejecutando el Estado español contra una fuerza política legítima, es decir, la del independentismo catalán. 

"El partido de gobierno, el PP, le ha negado sistemáticamente la posibilidad de ese referéndum, les ha querido arrebatar tanto la voz como el voto, han acorralado al movimiento hasta ir agotando los caminos del diálogo, y forzando una comprensible insumisión", dice la periodista ante la situación que se está viviendo en el país. "La reacción de España ha sido de un supremacismo inédito. A botazo limpio y decreto sucio han empujado el proceso hacia la represión policial y ahora van blandiendo la cárcel preventiva para quienes osen desafiar la estructura estatal".

Wiener ha querido explicar a su país que "ya hay nueve líderes independentistas en prisión, el pleno del Gobern, incluyendo a Carles Puigdemont, que ganó las elecciones en el exilio". Y también ha querido recordar los hechos del pasado 1 de octubre, "violento fue el primero de octubre del año pasado, cuando gran parte de los catalanes intentaron participar pacíficamente en un referendum y fueron duramente reprimidos".

Quizá el independentismo represente el 51 por ciento de la población de esa comunidad, como han manifestado, o quizá un poco menos, quizá no sean la mayoría, pero son muchos, son fuertes, están haciendo política y han demandado por pasiva y por activa su derecho a celebrar una consulta electoral a cerca de la necesidad o no de independencia. A raíz de los encarcelamientos de los políticos a causa del procés, la peruana ha querido recalcar que en europa la gente es consciente de la situación, tanto que el escritor británico, españófilo, John Carlin, ha hablado ya de que en España hay un golpe judicial en marcha, que “el Poder Judicial ha tomado el control del país”, según dice Wiener.