El periodista opositor ruso Arkadi Bábchenko, al que se dio por muerto hace dos días, reapareció ayer en una rueda de prensa en Kiev para demostrar que estaba vivo y reconoció a los medios que había participado en el montaje por parte de las autoridades ucranianas de su propio asesinato. Rusia ha tachado de "provocación antirrusa" esta puesta en escena. "Ahora ya se empiezan a conocer los auténticos motivos de la puesta en escena, que a todas luces es una nueva provocación antirrusa", informó el ministerio ruso de Exteriores en un comunicado.

Bábchenko explicó en la rueda de prensa que los servicios secretos ucranianos habían escenificado su muerte para abortar un supuesto complot ruso que incluía su asesinato y el de otras treinta personas en territorio ucraniano. La nota del ministerio ruso subraya que Moscú se congratuló con el hecho de que "el ciudadano ruso esté vivo", aunque denunció el intento de engañar "a toda la comunidad internacional" con motivos propagandísticos. "La cuestión de la vida y la muerte en Ucrania, al igual que la confianza de la comunidad internacional en su política, no es más que una moneda de cambio para instigar la histeria antirrusa del régimen de Kiev", señala.

Además, el Gobierno ruso se muestra convencido de que los ministerios de Exteriores occidentales y las instituciones internacionales "extraerán las correspondientes conclusiones de esta situación". Babchenko, de cuya muerte violenta se informó profusamente anoche, reapareció hoy en rueda de prensa para sorpresa de los periodistas locales y de la sociedad civil, que había convocado ya un acto de protesta en el centro de la ciudad.

El periodista crítico con el Kremlin, que abandonó Rusia hace un año y medio tras recibir amenazas de muerte, admitió que cooperó en los últimos dos meses con el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU, en sus siglas en ucraniano). Al parecer, su asesinato debía ejecutarse en vísperas de la final de Liga de Campeones, que se celebró el pasado sábado en la capital ucraniana entre el Real Madrid y el Liverpool (3-0). Antes de la rueda de prensa, el primer ministro ucraniano, Vladímir Groisman, se mostró convencido de que "la máquina del totalitarismo ruso" estaba detrás del asesinato, lo que fue negado por el Kremlin y el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov. Horas después, el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, felicitó al SBU por "la brillante operación para salvaguardar la vida (...) de Arkadi Bábchenko" y prometió proporcionar al periodista protección las 24 horas del día para evitar cualquier atentado contra su vida.

Antiguo militar profesional que combatió en las dos campañas de Chechenia, Bábchenko se recicló como corresponsal de guerra para el diario "Moskovski Komsomolets" y más tarde pasó a escribir para el periódico opositor "Nóvaya Gazeta", desde cuyas páginas criticó abiertamente el régimen del presidente ruso, Vladímir Putin.