El 2017 tiene que ser un año importante para el Reino Unido, y la primera ministra, Theresa May, ha querido empezar fuerte. A principios de abril tendrían que empezar las negociaciones para el Brexit, tal como ella misma indicó, y en la primera entrevista que ha hecho este año ha querido ser clara. El gobierno británico prefiere priorizar su derecho a limitar la inmigración que mantener el acceso al mercado único europeo cuando se marche de la Unión. Eso dejaría a los escoceses más cerca de celebrar un segundo referéndum de independencia, como así lo indicó la primera ministra escocesa, Nicola Sturgeon.

May dejó claro en su primera entrevista del año, realizada este domingo en la cadena Sky News, que no quiere mantener partes de la relación con los miembros de la Unión cuando se produzca el Brexit. "Nos estamos yendo. No seremos miembros de la UE por más tiempo", a lo que añade que, "seremos capaces de controlar nuestras fronteras, de controlar nuestras leyes".

May sabe que eso no es compatible con seguir dentro del mercado único, como ya ha indicado la UE varias veces, pero no parece importarle mucho. La primera ministra nunca había dado un signo tan claro de que se marcharía del mercado único, sin embargo aseguró que hará lo máximo posible para conseguir un tratado ambicioso.

¿Dónde deja eso a los escoceses?

Esta contundencia de May deja a los escoceses ahora más cerca de un nuevo referéndum de independencia. La primera ministra británica había hecho estas declaraciones sólo una hora antes de que Sturgeon hubiera dicho, en una entrevista en la BBC, que si hay un "Brexit duro" habría un segundo referéndum en Escocia. "No es un farol", destacó Sturgeon, que quiso avisar a May de que cometería un grave error si cree que no va en serio.

Por 'Brexit duro', Sturgeon entiende que Escocia quedara fuera del mercado único europeo, viéndose perjudicada económicamente, después de que un 62% de su población votara en contra de marcharse de la Unión Europea. En la misma entrevista, la líder de los nacionalistas escoceses, sin embargo, también dijo que si el Brexit es suave, se podría dejar el segundo referéndum escocés en stand-by a corto plazo.

Sturgeon se queja de que el gobierno británico no tenga un plan para la salida de la UE y de que tengan la misma información que hace seis meses. Por eso asegura que se siente frustrada.

¿Es posible un nuevo referéndum?

El punto más importante para aclarar si habrá un nuevo referéndum o no, es ver cómo queda el acuerdo por el mercado único. Aunque May haya sido clara en que priorizará la inmigración al tratado de libre comercio, sus declaraciones pueden enmarcarse en una declaración de máximos justo cuando están a punto de empezar las negociaciones.

Es importante, pues, esperar a ver cómo queda el nuevo acuerdo de relaciones entre la UE y el Reino Unido y en qué posición deja eso a Escocia. Si finalmente no hubiera un buen acuerdo comercial, Sturgeon podría convocar un segundo referéndum e intentar mantenerse como miembro de la Unión Europea. Sin embargo, Sturgeon ha dicho más de una vez que no convocará un referéndum si no ve que hay una voluntad diferente a la expresada en las urnas en el 2014, y las encuestas indican que las cosas no han cambiado demasiado desde entonces.