Comienza la operación bikini. En verano falta tiempo para cocinar y el bikini, un bocadillo con nombre de sala de baile -no es casual, allí le nació su apodo- resulta una gran propuesta ya que admite todo tipo de versiones e interpretaciones. Sal a correr, haz flexiones, salta a la cuerda... pero sobre todo, a medida que te pongas en forma, ve añadiendo grasa en la sartén; no sea que lo acabes consiguiendo.
Para 4 personas
- 8 rebanadas de pan de payés (o de molde)
- 4 lonchas de queso de cabra (200 g)
- 20 cerezas (200-250 g)
- 4 tiras de panceta ahumada o beicon
- 60 g de mantequilla
- 1 manojo de albahaca
Receta
- Lavar las cerezas con abundante agua fría. Cortar por la mitad, retirar el hueso (en el mercado también hay varios artefactos especialmente diseñados para esta tarea, llamados deshuesadores) y cortar las cerezas en rodajas.
- Lavar la albahaca con agua fría abundante y deshojarla.
- Sobre una rebanada de pan, ponga, de abajo a arriba: una loncha de queso, las rodajas de cinco cerezas, una tira partida en dos de panceta ahumada y cinco hojas enteras de albahaca. tapar con la segunda rebanada de pan.
- Calentar una sartén a fuego medio. Cuando esté caliente, poner los bikinis con un dado generoso de mantequilla debajo. Cocinar durante 5 minutos hasta que estén dorados, darles la vuelta, volviendo a poner un dado de mantequilla debajo. Cuando estén listos, cortarlos por la mitad y servir.
Consejo
Si cocinas los bikinis a fuego demasiado fuerte podrías terminar tostando el pan y quemando la mantequilla sin que llegue a fundirse el queso. Por lo tanto, es preferible cocinarlos con calma.
¿Con qué lo marido?
Con una cerveza IPA bien fría, de aromas afrutados y gusto amargo. En el mercado encontrarás todo tipo de posibilidades, de las más artesanales elaboradas con lúpulos nativos y ecológicos, a las IPA s industriales de cualquier gran marca, igualmente interesantes.