Hay vida más allá de la escudella berguedana a base de maíz escuadrado. De hecho, no tiene mucho sentido que un alimento que se conserva seco se consuma sólo en Navidad, cuando una vez hidratado puede acompañar cualquier fruto de la primavera, verano u otoño. Además, aparte de muy nutritivo y sin gluten -recordemos que el maíz de l’Escairador es del todo integral-, su agradable textura lo hace ideal para todo tipo de salteados. Sin duda, se trata de un ingrediente imprescindible de cualquier cocina catalana contemporánea.


LA GOURMETERIA 4 120 F

INGREDIENTES

  • 300 g de maíz escuadrado seco
  • 1 manojo grande de albahaca (50 g por lo menos)
  • 8 higos maduros Coll de dama
  • 1 cabeza de ajos
  • Pimienta negra en polvo
  • Hojas de tomillo o ajedrea deshidratada
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal

Receta:

  1. Lavar el maíz escuadrado con agua fría. Seguidamente, ponerlo en un bol, verter agua e hidratarlo durante 24 horas en la nevera.
  2. Poner una olla llena de agua al fuego. Cuando empiece a hervir, añadir una pizca generosa de sal y el maíz hidratado, previamente colado. Cocinar durante 1 hora y media y escurrir. Reservar.
  3. Deshojar el manojo de albahaca y sumergir las hojas en agua fría abundante durante unos minutos. Colar y reservar sobre papel absorbente.
  4. Calentar una sartén con un chorro muy generoso de aceite de oliva virgen extra. Cuando esté bien caliente, verter los ajos pelados y laminados y sofreír durante 20 segundos. Seguidamente, añadir las hojas de albahaca y una buena pizca de tomillo, tapar y cocinar 20 segundos más.
  5. Añadir el maíz escuadrado, salpimentar y saltear durante 2 o 3 minutos.
  6. Emplatar con unas rodajas de higos encima.

interior

CONSEJO

Aunque se recomienda hervir el maíz escuadrado durante dos horas y media, lo cierto es que si se ha empapado bien, al cabo de una hora o una hora y media (en función de si te gusta la pasta o los arroces más o menos al dente) ya es comible. En todo caso, pruébalo antes de escurrirlo; el grano debe ser gomoso pero crujiente, y completamente cocido en el interior.