Rafinha Alcántara se vuelve a sentir futbolista. El brasileño ha recibido este martes el alta médica seis meses y medio después de sufrir una grave lesión de rodilla que lo han dejado casi toda la temporada en fuera de juego. Este año sólo ha podido disputar ocho partidos: cinco de Liga, dos de Champions y la final de la Supercopa de España.

El centrocampista del Barça, que pasó por el quirófano el pasado 5 de diciembre para ser intervenido de la rotura de ligamento cruzado de la rodilla izquierda, ya hace tiempo que se entrenaba con el único objetivo de poder llegar a tiempo para al inicio de la pretemporada que empieza el próximo mes de julio. Así pues, Rafinha se convierte en un nuevo fichaje después de una ausencia involuntaria después de lesionarse en noviembre del año pasado en el Wanda Metropolitano contra el Atlético de Madrid.

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En las últimas cuatro temporadas el jugador ha sufrido tres lesiones de gravedad: la primera en septiembre de 2015 (ruptura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha); la segunda, en abril de 2017 (rotura del menisco de la rodilla derecha, de la cual fue operado en dos ocasiones); y la tercera esta última de la cual ya está plenamente recuperado. A pesar de la buena noticia, Rafinha vuelve a ser unos de los nombres que suenan para abandonar al Barça este verano.