El Barça vuelve a decir adiós a otro gran porción de la Liga Santander. Empate en Balaídos después de ver dos caras bien diferentes de un Barça que ha ido de más a menos y que se ha acabado llevando un insuficiente punto del campo del Celta de Vigo. Y si los blaugrana han quedado retratados sobre el césped, quien ha dado las excusas ha sido Quique Setién.

El entrenador del Barça cree que no se ha hecho justicia sobre el césped, que merecían los tres puntos, pero apunta que, como todo el mundo ha visto, "nos está costando". Las excusas de mal pagador las ha completado diciendo que uno de los problemas ha sido porque "nos hemos tirado atrás" en los minutos finales. Y garrotazo del Celta. Setién añade que les ha faltado "capacidad para gestionar el balón en los últimos minutos".

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Ha faltado gestionar el balón y también saber jugar con el marcador a favor. También que, aparte de Luis Suárez, que con un doblete es de los pocos que se salvan de una nueva pesadilla del Barça, "falta contundencia para transformar el dominio que tenemos en goles". Y sí, han faltado goles que habrían sido dos puntos más.

Setién reconoce que "cada vez tenemos menos margen de error y, en teoría, tendremos que ganar todos los partidos". Igual que hace unos días cuando se todavía eran líderes. Lo único que queda es rezar y esperar que "el Real Madrid se deje algunos puntos".