Pep Guardiola quiso sumarse a los incontables elogios que recibió el Barça después de remontar la eliminatoria contra el París Saint-Germain y conseguir una cosa única en la historia del fútbol europeo: darle la vuelta a un 4-0. El actual entrenador del Manchester City se acordó de una hornada de jugadores irrepetible: "Quiero felicitar sobre todo a Luis Enrique, al Barcelona, a sus aficionados y a esta generación de jugadores, que desde hace muchos años están consiguiendo muchas cosas. Tengo curiosidad por ver el partido porque obviamente no he podido (coincidía con el City 0-0 Sunderland). Es una gesta impresionante".

Si alguien puede decir que ya avisó de lo que era capaz este Barça, es el mismo Guardiola. Después del partido en el Parque de los Príncipes, con la moral del equipo prácticamente por los suelos, el técnico pronunció un discurso que sirvió para motivar a una parte de la afición blaugrana. "El Barça sigue siendo el mejor equipo del mundo. Siempre es una sorpresa perder así porque son muy buenos, pero en el fútbol puede pasar de todo. Hay mucha competencia y los rivales son muy buenos. En una mala tarde tuya y una buena del otro puede pasar. A mí me ha pasado", dijo antes de asegurar que no se diera por muerto al equipo antes de tiempo: "Si hay un equipo que puede remontar, con su mentalidad, es el Barça. Ha dominado el mundo del fútbol durante 10 años. Mi consejo es que no se les critique mucho porque volverán a sacarles la razón".