El Manchester City ha ganado su primer título de la temporada después de superar el Liverpool en la final de la Community Shield, el trofeo que enfrenta al campeón de la Premier League y la FA Cup. El conjunto de Pep Guardiola ha empezado ganando gracias a una diana de Raheem Sterling, pero en la segunda parte ha sido claramente inferior al equipo de Jürgen Klopp y ha visto cómo Joel Matip empataba el partido. Aun así, los de Manchester han sabido sobrevivir y finalmente se han coronado en la tanda de penaltis.

Sané y Sterling, protagonistas

Los partidos de pretemporada, por más oficiales que sean, siempre están condicionados por factores como el estado físico de los jugadores, los nuevos fichajes y las probaturas de los entrenadores. En Wembley, el City y el Liverpool han ofrecido espectáculo, pero también han hecho patente que tendrán que mejorar en muchos aspectos si quieren alcanzar el nivel que mostraron el curso pasado.

Así, los primeros 15 minutos de partido han servido para ver dos conjuntos entregados en ataque pero con poca intensidad defensiva. Leroy Sané y Raheem Sterling han podido marcar en los minutos 3 y 9, pero Mohamed Salah también ha intimidado al exblaugrana Claudio Bravo después de recibir una pase letal de Roberto Firmino. Posteriormente, ha llegado la primera gran noticia del de la tarde.

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Sané, a quien la prensa alemana sitúa en la órbita del Bayern de Munich, se ha caído sobre el césped de Wembley después de disputar una pelota con Alexander-Arnold. Todo apunta que puede tener una lesión grave en la rodilla, hecho que imposibilitaría su traspaso a la entidad bávara.

El KO del futbolista alemán, sin embargo, no ha afectado anímicamente a los jugadores del City, si no todo el contrario. Inmediatamente después de la sustitución del extremo por Gabriel Jesús, los de Guardiola han marcado el primer gol del partido gracias a Sterling. El inglés ha recibido una pase de espuela de David Silva en el interior del área pequeña y no ha perdonado delante de Alisson. Virgil van Dijk, por quien algunos seguidores piden el Balón de Oro, ha quedado retratado.

A partir de este momento, el City ha dominado la posesión pero no ha controlado los tempos del partido. Salah ha vuelto loco al ucraniano Oleksandr Zinchenko y ha disfrutado de dos ocasiones más para empatar, pero sus disparos han salido desviados. El City, por su parte, ha podido ampliar su ventaja gracias a la velocidad de un Sterling que no ha estado bien a la hora de definir. El recién llegado Rodri, mientras tanto, era incapaz de seguir el ritmo de sus compañeros.

¡Qué palo!

La diferencia entre Sterling y un extremo de élite absoluta como Neymar, Cristiano Ronaldo o Eden Hazard es su capacidad de ser decisivo en momentos clave. Como en la primera parte, el delantero inglés ha podido sentenciar el duelo, pero, una vez más, ha vuelto a fallar. Después de desmarcarse en profundidad y quedarse solo delante de Alisson, el ex del Liverpool ha enviado la pelota al palo. Sólo se habían disputado dos minutos del segundo tiempo.

La madera, eso sí, impartiría justicia para ambos bandos. En el minuto 56 Van Dijk ha rematado un córner al travesaño y, en la siguiente jugada, un disparo colocado de Salah también ha chocado con el palo.

Inmediatamente después, y con el fin de conformar un bloque más sólido, Guardiola ha retirado a David Silva y ha apostado por un mediocampista puro como Ikay Gündogan. La apuesta le podría haber salido bien, pero Sterling no ha sabido definir delante de Alisson cuándo lo tenía todo a favor para marcar.

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Quien perdona lo paga, y cuando quedaban poco menos de 10 minutos para el final Joel Matip se ha encargado de hacer valer uno de los tópicos más antiguos del mundo del fútbol. El mundo al revés: el central camerunés ha rematado un centro de su compañero en el eje de la defensa, Van Dijk, y ha situado el empate en el marcador.

Antes de acabar, Keita, Shaqiri y Salah -en cuatro ocasiones- han podido rematar al City, pero Bravo ha salvado su equipo con tres grandes paradas. Los espectadores, sin embargo, todavía no habían presenciado la acción más espectacular del partido. En el último minuto del tiempo añadido, el egipcio ha superado a Bravo con una vaselina con la cabeza, pero cuando la afición red ya celebraba la diana, Kyle Walker ha alejado la pelota de sobre la línea de gol con una tijera.

En la tanda de penaltis, y después de haber sobrevivido durante 45 minutos, el City de Guardiola -que este domingo ha sido el de Bravo- se ha coronado gracias a una parada del portero chileno a disparo de Wijnaldum. Sexto título de Guardiola con el City y 28º en su carrera como entrenador. El de Santpedor, un año más, no se cansa de ganar.