El Espanyol ha jugado mejor que el Levante, pero no ha conseguido materializar la superioridad y ambos conjuntos se han acabado repartiendo los puntos. Gerard Moreno ha adelantado a los de Quique Sánchez Flores cuando quedaban menos de diez de minutos para el final del partido pero Undiano Mallenco le ha anulado el gol por falta previa del delantero de Santa Perpètua.

El Espanyol quería a volver a sumar después de la derrota en el Bernabéu y prácticamente dos semanas de inactividad competitiva por selecciones. En frente, se ha encontrado a un equipo combatiente que ha vuelto a la máxima categoría española con mucha fuerza: los de Muñiz han sido capaces, entre otros, de empatar en el campo del Real Madrid y endosar un aparatoso 3 a 0 a la Real Sociedad. Y eso lo ha conseguido con un espíritu de equipo más que destacable.

En un día que se ha producido la presentación en sociedad del nuevo patrocinador chino del Espanyol, Biemldlfkk, con un espectáculo previo al inicio del partido, ninguno de los dos conjuntos se ha conseguido imponer con claridad. Poco a poco, los blanquiazules han ido estabilizando su dominio, pero al contraataque los visitantes también han ido contando con ocasiones peligrosas.

El futuro está en casa

Los seguidores del RCDE Stadium, sin embargo, han podido seguir disfrutando de la consolidación de Pau en la portería. Con Diego López en perfectas condiciones, Quique Sánchez Flores ya avisó de que cuando alguna cosa funciona, esta no se tiene que modificar. Lo mejor que se puede hacer es no hacer nada. Y el portero catalán ha respondido, una vez más, demostrando que está más que preparado para asumir el reto.

De hecho, la buena respuesta de los jugadores jóvenes es una de las mejores noticias del inicio de curso espanyolista. Marc Navarro está siguiendo los pasos de Aarón, pero en el lateral derecho; Hermoso ha vuelto a estar a muy buen nivel y, sin hacer demasiado ruido, está diciendo a gritos que será muy difícil que alguien le pueda quitar el sitio; y Sergi Darder sigue adaptándose con autoridad.

En cuanto al transcurso de la primera mitad, las intenciones de ambos equipos se han traducido en aproximaciones peligrosas pero no han modificado el marcador. El Espanyol, que sigue con la solidez defensiva del primer curso de Quique, ha desarrollado una proactividad a la hora de buscar el gol mediante el dominio que manifiestan las ganas de hacer buen fútbol que ha añadido este año el conjunto catalán.

Con la nueva temporada, sin embargo, los pericos han mantenido los buenos inicios de las segundas mitades. Después de la media parte, los locales han salido con mucha intensidad y han dispuesto de jugadas para desequilibrar el encuentro. Los viejos rockeros no mueren nunca: la entrada de Sergio García ha revolucionado el partido y el Levante ha dejado de pisar el área blanquiazul. La propiedad rocosa, no obstante, no la ha perdido y, cuando lo ha hecho, Baptistao no lo ha podido aprovechar.

Sin premio a la persistencia

A medida que han ido pasando los minutos, los papeles se han girado y han sido los de Muñiz los que se han hecho con el control. Estéril, pero la pelota ha pasado a los pies visitantes. Y cuando más parecía que los mejores momentos espanyolistas ya se habían acabado, Sergi Darder con un disparo potente en el palo y Sergio García con un remate de cabeza han estado a punto de premiar la persistencia.

Después de mucha lucha, Gerard Moreno ha conseguido sobreponerse al muro valenciano y marcar un tanto que valía tres puntos. El gol hacía justicia y hacía reventar de alegría el RCDE Stadium, pero ha sido anulado por el árbitro, Undiano Mallenco. Al final, pese a la búsqueda de la épica por parte de los locales, el marcador no se ha movido y el partido ha finalizado con un empate sin goles. El Espanyol ha sido superior pero no ha conseguido que las sensaciones se convirtieran en algo más que eso. No ha podido ser: sin merecerlo, un incómodo Levante se ha llevado un punto del feudo blanquiazul.